Recientemente el equipo de Sopitas.com nos lanzamos a la estación Salto del Agua, que es una de las 12 estaciones de la Línea 1 del Metro de la Ciudad de México que van a estar cerradas por un periodo de 8 meses.
¿Qué es lo que se tiene que cambiar? ¿por qué no pueden hacer estos trabajos de noche? ¿cuáles son los elementos en los túneles que tenían que ser renovados sí o sí?
En todo el recorrido por la estación nos acompañó el ingeniero David Escalante, coordinador de Planeación del proyecto de Modernización del Metro. Así que vámonos por partes…
Elementos que serán renovados en la Línea 1
En conferencias de prensa pasadas el gobierno de la Ciudad de México anunció los elementos en los túneles del tramo a intervenir que deberán ser retirados y renovados en su totalidad, por ejemplo las vías, los durmientes, todo el cableado, el balasto, etc.
Pero en este recorrido tomamos algunas fotos para darnos una idea.
Vamos a comenzar con las filtraciones de agua y los problemas de humedad en los túneles, un asunto que no solo pasa en la línea 1 pero que sí debe ser atendido con especial atención en la legendaria línea rosa.
“Lo mejor que podemos hacer con el agua en un sistema en operación es canalizarla, el agua va a encontrar su camino y lo mejor es que llegue al drenaje. Llegando al drenaje tenemos bombas que mantienen seco el túnel pero la filtración abre nuevos camino que terminan dañando tanto los cables como su soporte, la charola. Acá la podemos ver oxidada y cuando el muro ya está muy deteriorado, incluso el soporte que sostiene la charola pierde agarre y podemos tener algún problema con un cable”, nos explica el ingeniero.
Y es que estas filtraciones se hacen mucho más evidentes en épocas de lluvia. La presencia dentro de los túneles es un problema muy común. El ingeniero Escalante explica que arreglar esta situación será mucho más sencillo con los túneles limpios.
Pero no es lo único, también se van a renovar por completo los durmientes, los rieles, las pistas y el balasto, que amortigua el paso de los trenes. En esta foto podemos observar cómo los rieles, la barra guía, los durmientes y demás elementos ya fueron retirados de las vías, solo queda el balasto.
El ingeniero nos explica que ahora están en la fase de retiro, es decir, están quitando todos los elementos que serán sustituidos por nuevos. Por ejemplo, adelante van frentes de trabajo que quitan el cableado y las charolas. De igual manera, la vía se corta y se deja cortada para que luego pase una máquina cargadora, lo levante y lo retire.
Solo hablando del balasto, en este tramo de la Línea 1 del Metro se van a retirar 150 mil toneladas.
“El balasto tiene una distribución y tamaño controlado. Con el agua puede juntarse con otros materiales y queda prácticamente como concreto. Entonces esta función de amortiguamiento desaparece y eso a la larga daña los trenes, la suspensión, los ejes, los puentes y eso no es deseable”, señala el ingeniero.
Otro asunto, por ejemplo, son los durmientes que sufren un desgaste acelerado y se agrietan. Con el paso del tiempo la superficie de la pista se vuelve demasiado lisa y aunque existen algunos tratamientos para darles textura, por el tamaño de la intervención será mejor renovar todo por completo.