Estamos a poco más de dos semanas para que Foo Fighters lleguen por primera vez a nuestro país y se presenten en el Foro Sol de la ciudad de México. Hace unos días Rulo de Reactor 105 habló con Dave Grohl vía telefónica y esto fue lo que platicaron.
RULO: Antes que nada, me gustaría preguntarte por tus conciertos en México. Estaban de vacaciones, anunciaron que se tomarían un descanso y repentinamente anunciaron 2 conciertos en México ¿Cómo sucedió esto? y ¿por qué no han venido antes?
DAVE GROHL: Por lo general con los Foo Fighters trabajamos en estos ciclos donde nos metemos al estudio y escribimos la música y hacemos el disco. Luego nos vamos de gira y tocamos por un año, a veces dos años, y luego tomamos un descanso. Luego regresamos y hacemos otro disco, nos vamos de gira, estamos fuera por un año o dos y tomamos otro descanso.
En realidad nunca salimos de gira entre discos. Hacemos un nuevo disco, salimos y tocamos las nuevas canciones con algunas de las viejas canciones para la gente, y luego regresamos a casa, tomamos un descanso y trabajamos en otro disco. Entonces, nosotros siempre sabemos cuándo debemos parar. Ya llevamos haciendo esto por casi 20 años entonces cuando alguien siente que ha llegado la hora de tomar un descanso, simplemente nos detenemos. Hace como año y medio, empezamos a sentir que había llegado el tiempo para frenar la marcha porque para nosotros lo más importante es que esta banda dure por siempre y si la fuerzas demasiado la puedes romper. Nos gusta ser algo flexibles para decir, “muy bien, tomemos un descanso, quizás llegó la hora de parar, no para siempre, sino por un rato hasta que hayamos recargado nuestras baterías”. Por lo tanto, mientras hacía la película de Sound City, tuvimos que detener la gira de los Foo Fighters y decidimos darle un descanso a la banda por un tiempo.
Una vez concluido ese proyecto, comencé a escribir canciones para los Foo Fighters y se nos ocurrió una idea sobre cómo hacer el siguiente disco, algo que nadie ha hecho antes. Entonces, nos emocionamos mucho y nos juntamos para empezar a trabajar en toda esta música. No le dijimos a nadie, no hicimos ningún gran anuncio que estábamos de vuelta en el estudio. Simplemente somos un grupo de amigos y vivimos muy cerca de cada quien, nos juntamos en el estudio donde escribimos más canciones y luego nos emocionamos todavía más sobre tocar música de nuevo. Siempre pensamos que cuando fuéramos a regresar a tocar en vivo sería algo grande. No se trata de hacer lo mismo de siempre.
Nunca hemos tocado antes en la Ciudad de México, bueno, en ningún lugar de México, entonces pensamos que si vamos a regresar vamos a arrancar motores en un lugar donde nunca hemos estado y lo hacemos de una manera que sea grande. Entonces le llamé a nuestro agente y le pregunté “Hey, ¿crees que puedes conseguirnos un show en la Ciudad de México?” Esto fue hace apenas como tres o cuatro semanas y llegamos a un rápido arreglo. Ya hemos estado practicando en los últimos días y se siente bien, como en casa. Tocar con la banda es como vestir unos pantalones cómodos. Es emocionante, vamos a empezar a grabar nuestro disco muy pronto y no hay nada mejor que [esto para] hacerte recordar el tipo de banda que tienes antes de grabar un disco.
R: Estos dos conciertos rompen con el ciclo que acabas de describir
DG: Sí, esta es la primera vez que tocamos fuera de un ciclo de gira. Y sabes, hemos esperado todo este tiempo para viajar a México que pensé, si puedo juntar a la banda para tocar en lugares que nunca hemos visitado, entonces cuando regresemos a los lugares de costumbre llegaremos con más fuerza. Así es, es la primera vez que hacemos algo parecido. Nosotros nos vemos como una banda muy sencilla, hacemos las cosas a un nivel muy simple. Si ha llegado la hora para escribir canciones, yo le llamo a Taylor y Taylor le llama a Nate y Nate le llama a Pat y Pat le llama Chris y luego nos reunimos en el estudio.
No le llamamos a los managers, ni a los publicistas, ni a la disquera. Simplemente nos hablamos entre nosotros y nos ponemos a escribir canciones. Es chistoso lo rápido que esos boletos se vendieron en el estadio porque no sentimos que somos la banda más grande del mundo, simplemente somos un grupo de amigos que tiene una banda, y cuando nos enteramos que se vendieron 40,000 boletos en un día uno piensa “¡Dios mío! qué locura”. Todavía se nos hace difícil de creer. Eso nos emocionó mucho. Es algo bueno ser parte de los Foo Fighters.
No sé si viste el comercial de la gira pero la hicimos en un día. La cosa es que no quiero ser sólo una banda, no quiero que sean cinco tipos que van al estudio, graban una canción y luego van y venden camisetas y tocan en conciertos. No quiero hacer eso. Hemos hecho esto por tanto tiempo que quiero hacer cosas que la gente no ha intentado. Quiero hacer una película. Quiero pasar el día grabando a mis amigos y hacer algo realmente divertido o creativo. La idea de estar en una banda puede ser tan prosaica a veces. Pero si lo haces tuyo e intentas hacer cosas que nadie ha hecho antes, esto puede crecer. La idea que tenemos sobre nuestro próximo disco está padre. No es nada más regresar al estudio a grabar un disco. Es porque nos gusta enfrentar obstáculos e intentar cosas distintas. Pero algo como el comercial de la gira, estaba en el teléfono con un amigo mío y le dije que teníamos que hacer algo especial para ellos, algo gracioso.
Para mí, lo mejor de los Foo Fighters es que nos reímos todo el tiempo. Nuestras canciones son muy serias y tienen significados importantes para nosotros. Hay una profundidad en lo que hacemos. Pero nos encanta tanto que estamos felices, amamos la vida. Por lo tanto, constantemente nos estamos riendo. La risa es una parte enorme de nuestra banda. La idea de ese comercial se me ocurrió en dos minutos, entonces tenía que filmar a todos por separado como en The Song Remains the Same, la película de Led Zeppelin. Cada quien recibe un anuncio sobre la gira, pero vamos a doblar las voces al español y luego Erik Estrada va a estar en mi motocicleta [risas]. Era tan estúpido pero hace feliz a la gente. No lo sé. Es muy fácil y simple.
R: Hablas mucho de este nuevo disco, que es misterioso, poco convencional. Necesitamos algunas pistas
DG: Oh, Dios. ¿Puedo darte pistas? Déjame pensar en algunas buenas pistas. No se trata de llegar al estudio y grabar el disco. Ésa es una. Hay un tema más grande alrededor del disco que cualquier otro álbum de los Foo Fighters. No es un musical ni es una ópera, pero hay un motivo por el cual lo estamos haciendo de esta manera y nadie lo ha hecho antes, esta es la primera vez. Estoy muy emocionado porque a todos los que les he contado me han dicho “esa sí que es una idea chingona, no puedo esperar a escucharlo”. Creativamente, es mucho más que grabar un disco. Es un proyecto más grande y es genial. Yo he estado trabajando en esto por seis meses. Es algo grande y va a suceder el año que viene y va a estar en todo el mundo.
No puedo esperar más. La música es increíble, para mí es de un disco clásico. Y una de las cosas que nos gusta sobre todo lo demás es tocar en vivo, creo que ese es nuestro punto más fuerte. Cuando lleguemos al estadio a tocar, nosotros no tocamos nada más por hora y media, ni tocamos por dos horas, a veces tocamos por tres y te sabes casi todas las canciones que tocamos, y yo estoy corriendo tan rápido como puedo de un lado del escenario a otro durante todo el pinche show, animando a la audiencia para que se una a las canciones. Cada noche de mi vida lo único que quiero hacer es recrear a Queen en Live Aid 1985. Para mí eso es un concierto de rock. Ahí está nuestra fuerza. Y si tienes canciones que son divertidas en el estudio, entonces van a ser divertidas en vivo. Estoy emocionado.
R: Hay mucha planeación detrás de este disco. Suena como que grabar es también muy importante y le estás dedicando mucho también.
DG: Oh claro. En realidad no me gusta hacer nada a medias. Si yo voy a ser el baterista de tu banda, le voy a partir la madre a mi batería. Si voy a escribir una canción, voy a escribir un coro para que todo mundo cante. Si voy a tocar en vivo, yo voy a sudar y sangrar por tres horas. Así es como hago las cosas. Eso le digo a mis hijas cuando hacen su tarea. Si hacen algo para su tarea sin mucho esfuerzo les digo, “si en la vida sólo llegan a hacer lo que tienen que hacer, entonces no llegan a ser mucho. Pero si se dedican a hacer más de lo que tienen que hacer, entonces recibirán grandes recompensas”. Y siempre he pensado que también aplica con la música. Es lo mismo. Todo mundo piensa que trabajo duro. Pero no estoy trabajando. Estoy haciendo lo que amo, por lo tanto lo hago demasiado.
5. ¿Tienen la fecha en la que lo anunciarán?
DG: Yo me sé la fecha exacta aunque no podemos decir nada aún. Pero van a saber sobre eso, lo van a escuchar por ahí, no te preocupes.
6. De vuelta a los conciertos. Ya que estos conciertos no son parte de ninguna gira ¿Cómo preparan las canciones, el escenario y todo lo demás?
DG: Es chistoso porque lo hemos estado haciendo esta semana. Yo estaba trabajando en otro proyecto y Taylor dijo, “Ok, voy a juntar a los chicos para preparar, para que así, cuando vengas a los ensayos ya vamos a estar listos.” Entonces le dije ok. Luego me llamó después de los primeros dos ensayos y me dijo “Wow, necesitamos práctica.” No hemos tocado esas canciones en un año y él dijo, “necesitamos practicar más, no suena nada bien.” Entonces llegué ayer al estudio y obtuvimos un setlist de un concierto de hace año y medio, un show de estadio que hicimos en algún lado. Nos sentamos, tocamos todo el set y sonó bien cabrón. Los músculos de mi cuerpo tienen su propia memoria, ellos saben cómo acoplarse. Me acordé de todas las letras. Mis manos se acordaron de todas las partes en la guitarra. Mi voz sonó como siempre ha sonado. Fue así de ¡Wow! muy extraño.
Hoy practicamos de nuevo. Ayer estábamos tan emocionados por tocar -esto fue en el estudio, nadie nos estaba viendo- pero estábamos sudando y súper clavados en lo nuestro, que me doy cuenta la guitarra blanca de Pat estaba cubierta de sangre. Tenía una guitarra totalmente nueva y blanca, pero estaba tocando tan fuerte que se cortó las manos y terminó cubierta de sangre. Entonces le tomé una foto y la subí al pinche Twitter o algo así. Era una guitarra totalmente nueva y blanca y estábamos tocando “All My Life”, me doy la vuelta y había sangre brotando de su mano y manchando la guitarra. Nos empezamos a reír. Así de emocionados estamos por tocar en vivo otra vez. Al final de la noche, la mano de Pat estaba sangrada, yo me quedé sin voz, todo mundo estaba cubierto en sudor, dijimos “Todo bien, estamos listos.”
R: Hasta ahora has tocado con todos los músicos y las leyendas que admiraría cualquier músico. ¿Hay alguien con quien no hayas podido tocar?
DG: AC/DC es el único que falta, te lo juro. He tocado con los Beatles, con los Rolling Stones, con Led Zeppelin, con integrantes de Pink Floyd, con Aerosmith, con Prince, pero sólo falta AC/DC. Aunque quiero tocar con AC/DC, no puedo tocar con todo el mundo, tengo que dejar a alguien afuera. Además de todo, AC/DC es la banda más difícil de conocer en todo el mundo. Puedes conocer a todas las personas de este planeta antes de poder conocer a AC/DC, son un misterio y son mis favoritos. Cambiaron mi vida desde que vi su película Let There Be Rock, me cambió por siempre, me convertí en un punk ese día.
R: Te encuentras también muy ocupado como productor
DG: A mí realmente no me gusta producir, no me gusta ser un productor, hay veces que lo hago, pero la verdad no lo disfruto. A mí me gusta tocar. Producir el EP de Ghost, If You Have Ghost, fue divertido, pero desde que los del grupo llegaron al estudio les dije: “Quiero que ustedes hagan lo que ustedes quieran. Quiero que sean ustedes mismos y que graben el EP de la forma en que les gusta grabar. Lo único que yo voy a hacer es que suene con más fuerza, pero no quiero cambiar lo que hacen”. Esa es la forma en que me gusta producir bandas, pues no disfruto decirle a la gente cómo tocar sus instrumentos ni cambiar lo que hacen. Me gusta capturar el sonido de la banda.
Cuando produje a Zac Brown Band, el mejor grupo que he producido en mi vida, fue increíble. Todo lo que grabamos fue asombroso, es algo más que música country, algo indescriptible. Es algo rock, pero también tiene soul y un poco de country, pero también algo de rock sureño, es interesante, y lo único que tuve que hacer fue decir: “Ok, déjenme escucharlos”. Después de escucharlos lo único que hice fue corregir pequeños errores en la batería y en la guitarra, pero eso fue todo. La verdad no me gusta producir, lo mío es tocar. Amo los estudios de grabación, pero prefiero mucho más un escenario.
R: ¿Qué opinas de la radio y música comerciales? Porque ustedes tocan en estadios alrededor del mundo y como a muchas bandas en su misma posición no los vemos en la tele ni los escuchamos mucho en la radio pero ¿Qué te gusta de la radio comercial?
DG: Esa es una buena pregunta porque realmente no me gusta escuchar la radio comercial. A veces sintonizo alguna de esas estaciones y al escucharla me dan ganas de llorar porque es muy mala. Las canciones carecen de significado, la producción es terrible y los cantantes están demasiado fuera de tono… es horrible… es una mierda unidimensional y lo odio tanto que simplemente apago el radio y me pongo a buscar música que me guste, nuevas bandas que sean buenas y discos que sean creados por personas de verdad. Hay bandas que me gustan mucho; como Bat for Lashes, Metric, Kyng y el nuevo disco de los Black Crowes, por ejemplo. Hay mucha música muy buena, pero es chistoso, pues creo que la idea de que no hay nada bueno es errónea.
Sí hay mucha música muy buena, pero debes buscarla y encontrarla. En la actualidad la música me recuerda a lo que había justo antes de que Nirvana se volviera popular. Justo antes de la fama de Nirvana, la radio estaba repleta de pésima música pop y baladas de artistas que ni siquiera escribían sus propias canciones. También había infinidad de bandas de rock que usaban mucho maquillaje, estaban sobre-producidas y cantaban de pura mierda. En la televisión había concursos de gente cantando canciones horribles. Esa época estaba repleta de jóvenes que no sabían en qué creer musicalmente gracias a que no había nada bueno en la música comercial, todo era mierda, pero después algo pasó: muchas bandas que eran reales y que cantaban sobre algo real llegaron para dar un toque fresco y la gente decía: “Wow, la música es algo humano y es algo real, puedo creer en estas personas por que parece que lo hacen de corazón”.
Creo que es sólo cuestión de tiempo para que pase algo así otra vez y no quiero sonar como un viejo amargado, pues me encanta esa alocada y rara música electrónica como a cualquier otra persona (el nuevo disco de Melt Banana, escúchalo, es una locura) pero la gente quiere algo real. Esa es la razón por la que tocamos en grandes estadios ¿somos la mejor banda del mundo? no, ¿somos la banda más grande del mundo? no, ¿salimos y sangramos, sudamos y nos desgarramos durante tres horas para que la gente vea a personas reales en el escenario? sí… ésa es la razón. Hoy en día es muy difícil encontrar algo así, no hay muchas bandas que hagan eso y ésa es la razón por la que Iron Maiden llena estadios… son jodidamente geniales y son increíbles músicos que salen todas las noches y entregan todo, sin pistas, sin una madre como el auto-tune, son auténticos, eso es más o menos por lo que la gente va a verlos, creo… espero.
R: Este año tuviste que re visitar y hablar mucho de In Utero por la re edición de los 20 años ¿Lo disfrutaste o fue algo difícil?
DG: La verdad no me gusta mucho andar pensando sobre el pasado, estoy muy ocupado pensando en todas las cosas que tengo que hacer dentro de un año. Estoy muy orgulloso de todo lo que he logrado y estoy muy orgulloso de haber estado en Nirvana y de haber tocado con todas esas personas con las que he tocado, fue asombroso, pero me gusta hablar sobre lo que está por venir, así que cuando fue el 20 aniversario de Nevermind y In Utero fue algo difícil hablar de todo eso. Es particularmente difícil hablar de In Utero, pues ese disco representa para mí un periodo muy oscuro en mi vida, el cual fue antes de que Kurt muriera y todas las canciones son muy oscuras y me trasladan a ese lugar donde las cosas eran difíciles. Nevermind trae consigo muy buenas memorias, pues en ese entonces éramos unos niños que no esperábamos nada y de buenas a primeras no dieron las llaves del castillo, que te pase eso a los 22 años es algo muy raro, así que de esa época tengo muy buenos recuerdos. Pero para mí es muy extraño tener que recordar algo de hace 20 años porque no se siente como si hubieran pasado 20 años.
R: En los inicios de Foo Fighters ¿te imaginaste que esto sucedería con la banda?
DG: Cuando hice el primer disco de Foo Fighters estaba yo sólo. Siempre había grabado cosas por mí mismo, pero nunca había dejado que alguien más las escuchara debido a que era muy tímido sobre mi voz y estaba avergonzado. Después de la muerte de Kurt no sabía qué hacer con mi vida y no quería unirme a una banda como baterista, pues eso me recordaba a Nirvana y me daba tristeza, así que un día agarré mi guitarra y empecé a grabar cosas yo sólo en mi casa. Después pensé “Wow, debería ir a ese estudio que está al final de mi calle y pasar 5 o 6 días grabando las canciones que más me gustan”.
Acabé grabando un par de copias para dárselas a mis amigos y, eventualmente, alguien de una disquera lo escuchó y me pidió que hiciera un disco. Al inicio pensé que no debería ponerle mi nombre al proyecto y sólo llamarlo Foo Fighters para que la gente pensara que era toda una banda, pero al final me percaté que la música era lo que me iba a salvar y la única forma de curar mi corazón era tocando… así fue como todo empezó. Yo nunca, nunca, NUNCA imaginé que llegaría hasta el punto donde estamos hoy en día. Después del primer disco pensé “Voy a hacer otro disco más. Sólo para demostrarle al mundo que puedo hacer dos”, después del segundo álbum fuimos al sótano de mi casa en Virginia y decidimos solamente divertirnos un rato y grabar, de esa forma hicimos el tercer disco y luego el cuarto y así sucesivamente. Todo ese proceso se ha convertido en nuestra forma de vida. No es una marca ni un negocio, es más una forma de vida, así que no sé cómo sería vivir sin los Foo Fighters. He estado en esa banda casi la mitad de mi vida. Ha sido un viaje de locos, pero nunca lo abandonaría por nada en el mundo. Estoy emocionado por lo que viene.
¿Ya es 11 de diciembre? esa es la primera fecha en que se presentará Foo Fighters en el Foro Sol y si aún no tienen boleto aún pueden conseguir en taquillas y en TicketMaster. Recuerden que la del 13 de diciembre ya se encuentra agotada, y no se quieren quedar sin asistir a uno de los mejores conciertos del año ¿o sí?.
Nosotros podemos contarles que tendremos una GRAN sorpresa para un gran fan de los Foo Fighters que recordará por el resto de su vida, probablemente ese día se haga punk también, mientras pueden votar por el setlist que quisieran escuchar, y ahí mismo verán los contenidos diarios que hemos preparado como cuenta regresiva.
Agradecemos a Rulo y Reactor 105 las facilidades para compartir esta entrevista.