El fin de semana se difundió la noticia del secuestro masivo del que fueron víctimas los integrantes de un grupo de jóvenes que realizaban el recorrido de Guanajuato-Puerto Vallarta, conocido como el “Vallartazo”…
Sólo que inicialmente se dijo que habían sido 20 las personas secuestradas (al parecer por miembros del Cártel de Jalisco Nueva Generación) y, ayer que la Fiscalía de Jalisco (por fin) dio a conocer que abrió una carpeta de investigación por el caso, resultó que sólo daba por desaparecidas a cuatro personas.
¿Y el resto?
Sin entrar en muchos detalles, por aquello de la secrecía de la investigación, el fiscal del Estado de Jalisco, Gerardo Octavio Solís, señaló que uno de los testigos de los hechos (según el funcionario, un sobreviviente), declaró que todo el grupo de turistas fue secuestrado, sin embargo, la gran mayoría fue liberada.
“Menciona que fueron privados de su libertad y trasladados a un domicilio, para posteriormente ser liberados, quedándose en un número de tres personas privadas de su libertad… al parecer”.
De acuerdo con el fiscal, el ataque contra el grupo de personas que realizaba “El Vallartazo” fue dirigido especialmente contra esas tres personas (quizás son cuatro, todavía no lo tienen bien definido las autoridades).
Según indica Proceso, a más de 10 días de haberse cometido el secuestro, los responsables no han solicitado rescate por las personas privadas de su libertad. Por otra parte, con ayuda de las autoridades de Guanajuato se logró saber que la persona que perdió la vida en el secuestro tenía algunos domicilios registrados en Santa Rosa de Lima, Guanajuato… y que algunos de sus familiares contaban con antecedentes penales.
El fiscal no señaló si esto último tiene que ver con el secuestro… pero le gustó para soltar el dato.
¿Y por qué hasta 10 días después se investiga el secuestro masivo?
Durante una conferencia de prensa ofrecida a medios, el fiscal Gómez señaló que, efectivamente, las autoridades entraron en acción un poquito tarde… tomando en cuenta que el secuestro se dio el pasado 18 de julio.
Según el funcionario, las autoridades se avocaron más a investigar la muerte de uno de los jóvenes, dejando pa’ después el asunto del secuestro… con todo y que tenían conocimiento éste pudo haber ocurrido.
Fue hasta el pasado domingo que “se evidenció que algunas personas fueron privadas de su libertad” que se abrió la carpeta correspondiente: “hasta que hubo evidencia tangible”, señaló el fiscal.
Sumado a lo anterior, tal y como se indicó en un comunicado previo, el funcionario señaló que una persona denunció formalmente la desaparición de uno de sus familiares. Un nuevo “avance” en las investigaciones, según el fiscal… ya que ahora sí saben “a quién buscar”. Es decir, al parecer todavía no saben la identidad de las otras personas que fueron secuestradas… pero saben que deben buscarlas.
