¡Sorpresa!, un exgobernador más de eso que llamaron “El Nuevo PRI” podría ser detenido en breve… bueno, eso si las autoridades se ponen las pilas y logran seguir el rastro que César Duarte habría dejado luego de abandonar Chihuahua con más de 10 mil millones de pesotes que desvió del erario.

De acuerdo con El Universal, la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade), solicitó a la Procuraduría General de la República (PGR) la aprehensión del exgober chihuahuense por el posible desvío de recursos para campañas del PRI… sí: aparentemente César Duarte se sumó a la cooperacha que armaron Javidú, Roberto Borge y Rubén Moreira para las campañas del tricolor.

El exgobernador de Quintana Roo, Roberto Borge, regaló terrenos a sus amigos y familiares

Mientras que el otro Duarte y Borge juntaron 500 milloncitos y de Rubén Moreira apenas se está calculando de a cómo fue el sablazo, César Duarte se puso espléndido y habría desviado más de 10 mil millones de pesos. Lo anterior de acuerdo a las investigaciones hechas por la Fiscalía, la cual ya armó un expediente con el que se solicitó la detención del exmandatario… de quien no saben bien su ubicación, pero –por si las dudas– la pidieron con fines de extradición, en caso de que esté en el extranjero.

De confirmarse lo difundido por el diario capitalino, quiere decir que las autoridades decidieron no esperarse a ver si, de pura casualidad, Duarte decidía aparecerse para responder al citatorio que la misma Fepade emitió para que el exgobernador aclarara las acusaciones en su contra por el desvío de recursos públicos. La cita se acordó para el próximo 23 de junio.

Quizás le hubiera salido más barato responder al citatorio, ya que en éste sólo se le acusaba del desvío de 800 millones de pesos… ahora son 10 mil millones los que se le achacan, los cuales habría obtenido al aplicar varias mañas. Una de ellas al más puro estilo de Delfina Gómez, ya que consistía en descontar 10% de su sueldo a por lo menos 700 funcionarios del gobierno de Chihuahua. Claro, todo iba directito a las arcas del PRI. “Se trataba de una concentración del recurso y después de manera mensual se expedía un cheque, que era depositado en una empresa particular”, señala El Universal.

Además de las investigaciones de la Fepade, la tierra que ya tiene encima Duarte le cayó por parte del exdirector de Administración del Estado, Gerardo Villegas, quien en su calidad de testigo protegido confesó que César Duarte desvió 250 millones de pesos para el financiamiento de la campaña del PRI en 2016.

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