Sólo esperemos que los oficinistas del gobierno de la Ciudad de México no agarren esto como pretexto para reproducirse cual Gremlins.
A través de un anuncio del jefe capitalino, Miguel Ángel Mancera, se dio a conocer que todo aquel servidor público que cuente con hijos, podrá retirarse temprano a casita todos los viernes y no cada quince días, como estaba acostumbrando. Esto con el objetivo de arruinar el fin de semana de los chamacos, quienes estarán bajo el ojo paterno por más tiempo. En teoría… todo depende de que el papá (o la mamá) no decida mejor irse a ligar a una de las tantas cantinas del Centro Histórico.
A diferencia de lo que pasaba anteriormente, esta medida ahora será pareja: tanto para hombres como para mujeres, ya que -según Mancera- la nueva política laboral ha funcionado bastante bien. Así el feliz anuncio:
“Para efectos de que no haya confusiones, le damos la instrucción al Oficial Mayor (Jorge Silva) para que ahora todos los viernes, absolutamente todos los viernes, a las tres de la tarde se retiren a sus hogares y se retiren a sus casas a convivir con sus familias”.
“¿Y qué fregados voy a hacer todas esas horas con el chamaco?”, preguntará algún padre o madre a la que no se le ocurre en qué ocupar horas con ese muchacho que se la pasa encerrado en su cuarto oliendo a petate. Las sugerencias corrieron por parte de Mancera:
“Programen sus viernes, váyanse al cine, váyanse a los parques, váyanse a lo que tenemos. Tenemos muchas cosas en la Ciudad que está generando cultura, convivencia, esparcimiento, aprovéchenlo. Estoy seguro que vamos a tener trabajadoras mucho más contentas, mucho más comprometidas”, recomendó.