El último testigo del suicidio del Führer del Tercer Reich fue Rochus Misch, exguardaespaldas de Adolf Hitler durante la mayor parte de la Segunda Guerra Mundial, quien falleció el día de hoy a la edad de 96 años en Berlín.
En una entrevista concedida en 2005 Misch habló de Hitler como “un hombre muy normal” e hizo un relato fascinante de los últimos días del dictador alemán antes de que él y su esposa Eva Braun se quitaran la vida. Misch, miembro del personal destinado al servicio de Hitler en la década de 1940, recordaba ya con lagunas la escena que vivió el 30 de abril de 1945.
Hitler “tenía la cabeza sobre la mesa, mientras Eva la tenía ladeada. Ya no recuerdo bien, ¿estaba sentado en el sofá o en un sillón al lado? Pero sigo viendo a Eva, con las rodillas encogidas hasta el pecho”, decía.
Durante cinco años , Misch formó parte del círculo íntimo del Führer, como guardaespaldas, mensajero y telefonista. En una entrevista en 2009, afirmó desconocer el holocausto judío, dijo que no sabía nada del asesinato de seis millones de Judios y que Hitler nunca planteó la Solución Final en su presencia.
“Yo sabía de campo de Dachau y sobre los campos de concentración en general “, dijo a la BBC en 2009.
Se formó como pintor antes de unirse a la SS y sirvió como soldado en Polonia en 1939 , antes de ser nombrado del séquito personal de Hitler. Su primera tarea fue entregar una carta a la hermana de Hitler en Viena.
“Dos de nosotros funcionábamos como operadores telefónicos. Con un jefe como Hitler, había siempre un montón de llamadas telefónicas. “
Con el avance de los aliados y los nazis en el borde de la derrota , Hitler se retiró a su búnker de Berlín y Misch se convirtió en el último testigo del drama que tuvo lugar allí el 30 de abril de 1945. Dijo que estaba en el teléfono cuando Hitler se suicidó , por lo que no escuchó los disparos.
Nacido en 1917 en el pueblo de Alt Schalkowitz en lo que hoy es Polonia, Misch se quedó huérfano a temprana edad y se unió a las SS a los 20 años, debido a su anticomunismo y hostilidad hacia Stalin.
“Luché contra el bolchevismo, no por Hitler, él no era “ni un matón, ni un monstruo ni un superhombre. Fue un gran jefe”, afirmó Misch .
Misch estaba en un bunker bajo la Cancillería del Reich en Berlín a finales de abril y mayo de 1945, poco antes de la caída del Tercer Reich. Al servicio del teléfono, que estaba en un bunker, el 30 de abril, cuando Hitler con Eva Braun, con quien se casó el día anterior, se había suicidado. Misch afirmó haber visto el cadáver de Hitler.
Misch abandonó el bunker, tratando de escapar de Berlín, pero poco después, fue detenido por soldados del Ejército Rojo; paso nueve años prisionero en la URSS. Posteriormetne se trasladó al oeste de Berlín, donde vivió hasta su muerte, regresó en 1954.
Se rumora que el cráneo reconocido como el cráneo de Hitler era en realidad el de una mujer y que Hitler vivió hasta la vejez en Argentina con la ayuda de la CIA, a cambio de información de inteligencia sobre Rusia y la mayoría de los países de Europa. Información que nunca fue confirmada por Misch.
