Lo que necesitas saber:
La falla Plateros-Mixcoac es una falla activa que ha causado daños en casas, edificios y carpeta asfáltica de esta zona del poniente de CDMX. Recién su existencia fue confirmada por ingenieros de la UNAM.
En los últimos meses, los chilangos que viven en el poniente de CDMX han sido sorprendidos por sismos o los llamados microsismos con epicentros justo debajo de sus pies. Muy posiblemente estos movimientos son causados por la recién confirmada falla Plateros-Mixcoac.
La UNAM ha explicado que la falla Plateros-Mixcoac se extiende aproximadamente desde el poniente de Anillo Periférico hasta unos 300 metros al este.
Para fines prácticos, esta falla va casi casi de la Unidad Lomas de Plateros —cruza avenidas importantes como Periférico, avenida Revolución, Patriotismo y Río Mixcoac— a las inmediaciones de la Universidad Panamericana.
Un geólogo nos explica qué onda con la falla Plateros-Mixcoac
Y como sabemos que este tema seguirá en tendencia por su importancia no sólo para los vecinos y las vecinas de la zona Plateros-Mixcoac —y porque hay un montón de cosas por saber— en Sopitas.com conversamos con el geólogo Alejandro Méndez, quien nos compartió de su sabiduría para entender un poco mejor qué está pasando con la falla.
Nada más que antes de avanzar les dejamos este resumen: el Instituto de Ingeniería de la UNAM publicó una investigación preliminar cuyos resultados lograron identificar y confirmar la existencia de una falla que podría ser la causa de los sismos registrados entre diciembre de 2023 y enero de 2024 en las alcaldías Álvaro Obregón y Magdalena Contreras.
Sí, esto lo hicieron gracias a la colocación de estaciones e imágenes satelitales que siguieron el rastro de los sismos registrados entre el 3 de diciembre de 2023 y el 10 de enero de 2024 —con magnitudes de entre 1.1 a 3.2.
Las huellas de la falla
Ok, para hablar de esta falla es importante decir que no se trata de una estructura nueva. Ya estaba allí desde hace tiempo, sólo que con los recientes sismos —o su reciente actividad— y la investigación del Instituto de Ingeniería de la UNAM se ha confirmado su existencia. Acá lo explica mejor Alejandro Méndez:
“No es una falla nueva, no es una estructura geológica nueva, esta estructura ya se había definido desde los años 70 gracias a los trabajos del geólogo Federico Mooser, quien en esos momentos hizo 36 mapas de geología de la cuenca de México y ya se delimitaba que había una falla”.
Y si bien ya se infería su existencia —hasta la bautizaron falla Mixcoac—, la verdad es que nunca hubo momento para llegar a las conclusiones que confirmaran su existencia… hasta en los últimos días que conocimos el reporte de la UNAM con su recién actividad.
Pero si ya lleva años, ¿por qué hasta estos meses se perciben más los sismos?
“La gente dice: ‘Llevo 40 años viviendo en esta zona’, sí pero esta falla lleva 2 millones de años ahí, la falla siempre ha estado y sí se tienen reportes de enjambres en los 80 y 90 en esa misma zona, reportes de sismos en los años 50, pensaban que eran minas”.
Sin embargo, continúa el geólogo del IPN, en aquellos años no había sensores ni un monitoreo específico sobre la zona.
Además, sigue Alejandro Méndez con la explicación, “hace 70 años la zona era un sistema de ejidos y si había un sismo nadie lo pelaba”, ahora, la densidad de la población e infraestructura es tan grande que no pueden pasar desapercibidos.
Algo similar explicó el grupo de especialistas de la UNAM sobre por qué en estos años nos estamos percatando aún más de los sismos con epicentro en CDMX porque, en parte, contamos con mejores instrumentos para monitorearlos y estudiarlos, además de la cuestión de la densidad poblacional mencionada por Méndez.
Si hay alguna duda de que los sismos sean causados por la activación falla Plateros-Mixcoac, entonces podemos seguir las huellas que dejan, tal cual lo hizo el Instituto de Ingeniería de la UNAM.
Los tipos de fallas que están en toda CDMX
“Cada sismo es único, tiene una huella digital, el tiempo de arribo de cada onda al sensor te va a decir qué es lo que lo generó (…) si la falla está hacia arriba, abajo o lateralmente”.
De esta manera, Alejandro Méndez nos presenta los tres tipos de fallas identificados en toda CDMX —y que al estudiarlas, especialistas en ingeniería y geología saben que estas están entrando en acción, provocando sismos.
- Tenemos la falla normal o de caída —como la de Mixcoac-Plateros— que no es otra cosa que la caída de uno de los bloques con respecto al otro.
- La falla inversa, que es el mismo proceso pero hacia arriba, uno de los bloques está detenido y el otro va pa’ arriba.
- La lateral, en la que los bloques se mueven lateralmente, como en la falla de San Andrés.
El punto es que estas fallas están por toda CDMX y… hay que pensarlas como una red compleja con sus subfallas e intersecciones, no tanto como un área plana y sin conexiones porque, como ya ven, el ejemplo más claro lo tenemos en Plateros-Mixcoac.
(Y además su estudio permite saber si los sismos son provocados por este tipo de fallas o… construcciones del Metro, las minas u otro tipo de teorías que han surgido).
La falla podría ser más grande
De acuerdo con el geólogo Alejandro Méndez, todo indica que esta falla podría ser más grande de lo que la UNAM ha logrado identificar.
La clave estaría en el mismo río Mixcoac que desembocaba en el Parque de los Venados —en la época de la llegada española a Tenochtitlán— y lo que hoy sabemos que se mueve (la parte activa) es sólo una parte de una estructura aún más grande. Pero para confirmar esa hipótesis faltan muuuuchas investigaciones.
El santo grial
Entonces, ¿qué es lo que activó o reactivó a esta falla? La mera verdad, nos dice Alejandro Méndez, esta pregunta representa algo así como el santo grial de la geología porque hay un montón de causas, que puede ser una o todas juntas, y cuyo estudio lleva montones de años. Hasta siglos.
La UNAM también ha explicado que las causas de la activación o reactivación de esta falla pueden ir desde el hundimiento de nuestra querida CDMX, el impacto de los sismos con epicentro en las costas del Pacífico o la recarga de los acuíferos, en especial de la Sierra de las Cruces.
La importancia de las investigaciones
Como saben, los/las habitantes de esta zona viven ahora en la incertidumbre ante los sismos con epicentro debajo de sus casas —que han causado daños severos en sus casas, edificios y la carpeta asfáltica.
Tanto la UNAM como el geólogo ingeniero Alejandro Méndez explican que aquí radica la importancia de la continuación de esta investigación.
Sobre todo para diseñar planes de protección civil en cuanto a la construcción de los edificios en esta zona de la alcaldía Álvaro Obregón.
“Es una falla activa… esta zona seguirá moviéndose, no orita no mañana, quién sabe, y los protocolos de construcción tienen que cambiar en esta zona de la ciudad para aguantar estos movimientos”.
Las recomendaciones del geólogo Méndez van desde estar monitoreando la infraestructura de las casas y edificios, reportar cualquier separación, quiebres, rompimiento de azulejo y verificar si hay un movimiento o que crezcan.