Carlos Chávez, chofer de la pipa de gas perteneciente a la empresa Gas Express Nieto, cuya fuga provocó una explosión que hizo colapsar el Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa, fue puesto a disposición de una jueza en materia oral, esto por orden de la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal.
La Procuraduría señaló que las otras dos personas que operaban la pipa el día del incidente y que se encentran hospitalizadas- Julio César Martínez Ortega y Salvador Alatorre- fueron puestas en libertad, pero aún continúan bajo custodia de las autoridades.
La decisión que se tomó respecto al chofer Carlos Chávez se dio debido a que se venció el plazo constitucional de 48 horas que el ministerio público tenía disponibles para presentar un caso ante el juez de control. En el caso de las dos personas que quedaron libres, se aclaró que Martínez Ortega no era empleado formal de la empresa: sólo asistía al conductor de la pipa y a su ayudante, Salvador Torre.
Éste último sí es empleado de Gas Express Nieto, pero por declaraciones de testigo se sabe que se encontraba en el primer piso del hospital al momento de presentarse el incidente. Sin embargo su libertad se da bajo custodia de la policía de investigación.
Cabe señalar que según los primeros informes que ha dado a conocer la procuraduría capitalina, la explosión que hasta el momento deja un saldo de 3 muertos y 26 personas lesionadas fue provocada por una fuga de gas lp, la cual se dio en una de las mangueras de la unidad abastecedora, cuando ésta se encontraba en el estacionamiento del hospital.
La acusación en contra de Carlos Chávez se realizó este sábado y su primera audiencia podría suceder este lunes o martes, en caso de que el inculpado sea dado de alta en el hospital en el que se encuentra debido a lesiones por quemaduras que presenta en varias partes del cuerpo.
*Vía Noticieros Televisa