A veces parece que vivimos como Ricitos de Oro. Primero nos quejamos o nos preocupamos de las sequías y semanas después, cuando por fin llega la esperada lluvia, resulta que también estamos frente a un grave problema. Lo interesante aquí es que, aunque a primera vista no lo parezca, las rápidas inundaciones también están conectadas con la falta de agua.
Un rápido experimento —que se ha vuelto viral en la Universidad de Reading— lo explica en tan solo un minuto.
La sequía o la forma en que nuestro suelo recibe cada vez menos agua, sobre todo después del verano, son un gran factor de riesgo al momento que llegan las lluvias. De hecho, es un efecto que ha provocado inundaciones en todo el mundo.
El video sobre sequías e inundaciones
El investigador Robert Thompson, un doctor del Departamento de Meteorología de la Universidad de Reading en el Reino Unido, se hizo súper viral en semanas recientes por un interesantísimo video tomado en los jardines de su escuela.
Utilizando un vaso de agua de plástico —el más común que se les pueda ocurrir— demostró que los suelos secos, que han pasado por la sequía, no son capaces de absorber el agua que caería por las lluvias. El video es una locura: en pasto húmedo el agua literalmente se incorpora al piso en menos de 9 segundos.
¿En pasto completamente seco? El mismo vaso de agua sigue sin ser absorbido, aún cuando pasan casi 5 minutos. Échenle un ojo:
“Es difícil que el suelo seco absorba agua”, explicaba el científico de la Universidad de Reading. “Suelos secos, agrietados, repelen el agua de las lluvias en lugar de incorporarla, como sucedería con el pasto húmedo. Esto significa que la lluvia se acumula en la superficie y aumentan los riesgos de inundaciones instantáneas”.
Por supuesto, en sus artículos se refiere a las sequías que se han visto en el Reino Unido, pero el experimento de cómo el agua de lluvia provoca inundaciones en época de sequía sirve para todo el mundo.
