El día de ayer, la Procuraduría de la capital dio a conocer que ninguno de los 25 perros “detenidos” en el lugar en que se realiza la representación de la Pasión de Cristo, en Iztapalapa, es responsable de los ataques en que perdieron la vida cinco personas.
Luego de diferentes pruebas, a estos caninos no se les pudo hallar algo que determinara que habían consumido carne o huesos humanos…además de que ninguno de ellos presentó conducta agresiva, por el contrario, se mostraron de lo más pasivos.
No obstante aún falta que a otros 30 perritos -que en los últimos días han sido capturados por la Brigada de Vigilancia Animal y hasta el momento se encuentran bajo el resguardo del Centro de Control Antirrábico de la Unidad Habitacional Vicente Guerrero-, se les practiquen estudios en materia de química, genética, patología y veterinaria.
Obviamente los canes “exonerados” no serán puestos en libertad, pero la PGJDF señaló que no serán sacrificados y podrán ser adoptados en caso de que no sean reclamados por sus dueños.
