¿Cuántas veces les ha tocado que se suben a un camión y su conductor está jugando carreritas con el de a lado? ¿Cuántas veces les ha tocado que el chofer venga con su celularsote en la mano mientras conduce? ¿O que esté manejando de manera muy descuidada? ¿O que esté agresivo con los pasajeros? Estos solamente son algunos ejemplos de las conductas cotidianas que algunos choferes del transporte público tienen en la Ciudad de México. Quizás, estas postales, son las más ligeras. El caso de Valeria volvió a prender las alarmas sobre la inseguridad que se vive en el transporte que utilizamos día con día. En los riesgos que implican subirse a un taxi, a una combi o a una pesera.
Para evitar que casos como el de Valeria se repitan, el legislador perredista Iván Texta Solís propuso que se practiquen, de manera obligatoria, exámenes psicológicos a los conductores de estos transportes antes de que obtengan su licencia de conducir. Con esta medida se busca garantizar la seguridad de los miles y miles de pasajeros que nos movemos en los servicios. Texta Solís buscará que los choferes del transporte público, así como los que brindan servicio a través de plataformas digitales como Uber y Cabify, sean sometidos a los exámenes psicológicos y psicométricos para determinar si son aptos. “No podemos vivir con el miedo de que nuestros hijos viajen solos en el transporte público, por lo que proponemos evaluaciones más profundas que regulen las condiciones del transporte y de quienes lo conducen”.
El legislador del PRD indicó que buscará que haya medidas más estrictas para otorgarles permisos a los conductores del transporte público. Entre los nuevos requisitos se encuentra que los choferes no cuenten con antecedentes penales y que se sometan a exámenes toxicológicos. De acuerdo con el Diagnóstico sobre la violencia contra las mujeres y las niñas en el transporte público de la Ciudad de México, 44.8% de las agresiones sexuales contra mujeres se registran en la calle y 11.5% ocurren, precisamente, en el transporte público. Según cifras de la Secretaría de Movilidad, los autobuses y camiones de la ciudad transportan diariamente a más de 12 millones de personas, constituyendo así, alrededor de 60% de la demanda total de movilidad en la CDMX.
