Por si andaban con el pendiente, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) comentó que sí tuvo chance de despedirse del exmandatario de Bolivia, Evo Morales.
Contrario a lo que dicen algunos (que porque “dicen” que su salida fue parte de las negociaciones del T-MEC), Evo Morales se fue muy agradecido con el gobierno de México y, en general, con todos los mexicanos.
Según comentó AMLO en su conferencia mañanera, Evo se despidió de él vía telefónica antes de irse para Argentina.
“Se despidió de mí Evo, no para siempre. Se despidió de mí porque se fue a Argentina. Hablamos, le dije que esta era su casa y que estaban las puertas abiertas para Evo y para todos los luchadores sociales del mundo, haciendo honor a lo que ha hecho nuestra política exterior que ha sido ejemplar en otorgar asilo a perseguidos políticos”.
El presidente mexicano agregó que, antes de que Evo se fuera, le recordó la posición de su gobierno respecto a la situación que se vive en Bolivia. Específicamente a lo relacionado con la presidencia de Jeanine Áñez.
“Hemos dejado de manifiesto que no queremos dictaduras militares. Democracia sí, militarismo no”, le dijo AMLO a Evo Morales, claramente señalando que (para él) el gobierno de Áñez tiene tintes militaristas.
Esta semana Evo Morales llegó a Argentina, donde se quedará en calidad de refugiado. Por medio de su cuenta Twitter, expresó su agradecimiento al gobierno de México por salvarle la vida. “Me sentí como en casa junto a las hermanas y hermanos mexicanos durante un mes”.
El gobierno argentino del recién ascendido Alberto Fernández dejó claro que sí reciben gustosamente a Evo Morales… nomás con una condición: que evite expresar posiciones políticas. Así que, a diferencia de lo que ocurrió en México, Evo ya no podrá comentar nada respecto a las futuras elecciones presidenciales en Bolivia.