Jóvenes donan su beca “Benito Juárez” para construir una preparatoria en Querétaro 👏

Aunque mucho se les criticó a los jóvenes por recibir la beca “Benito Juárez” -que equivale a mil 600 pesos bimestrales para los estudiantes-, en lo que va del año hemos conocido casos de chavitos que han invertido el dinero para bien, como fue el caso de David Yépez, un joven de Chihuahua que recibió una donación de varios de sus compañeros que buscaban ayudarlo con sus gastos en la universidad, pues él no pudo acceder al apoyo económico.

Este caso es un poco similar, ya que en Querétaro, varios alumnos de preparatoria donaron parte de sus becas del gobierno para comenzar la construcción de una escuela de bachillerato en la comunidad de La Monja, en Santa Rosa Jáuregui, en dicho estado de la república, una medida a la que han tenido que recurrir varios maestros y estudiantes del lugar ante la negativa de las autoridades locales y estatales de construir un plantel educativo.

Amanda Díaz, responsable del telebachillerato comunitario La Monja, dijo que este proyecto es para que los estudiantes de bachillerato tengan una escuela para ellos, ya que en la actualidad comparten espacio con jóvenes de secundaria, algo que de alguna manera no les permite tener un desarrollo educativo apropiado a su edad, realizar prácticas acordes a su grado escolar e incluso, no les permite guardar los libros que utilizan o tener computadoras para trabajar.

Lo más grave es que desde hace cuatro años, de acuerdo a Amanda, los padres de familia, maestros y alumnos comenzaron a buscar ayuda del gobierno para poder tener la escuela que merecen, sin embargo, siempre se topaban con la misma respuesta: “no hay forma de ayudar“. Claro que eso no fue un impedimento para ellos, ya que al ver la negativa de los funcionarios, comenzaron a unir fuerzas y emprendieron la construcción de su propia escuela.

Primero, a través del medio legal obtuvieron un predio ejidal que fue donado para la construcción de la escuela. Ya teniendo el lugar, todos los padres de familia y maestros comenzaron con la cooperación. Pero no sólo ellos, ya que los alumnos también quisieron poner su granito de arena y aportaron una parte de la Beca Benito Juárez que les dio el gobierno federal, con lo que pudieron comprar un lote de tabique que costó casi 10 mil pesos, de acuerdo a información de la agencia Quadratín.

La maestra Amanda también mencionó que a pesar de que no han recibido ningún tipo de apoyo, ni ella ni los involucrados tienen la intención de rendirse en este sueño, y que seguirán con la construcción de la escuela aunque los alumnos tengan que acarrear agua o hacer una cadena humana para acercar los tabiques y ayudar a los dos albañiles que son contratados por semana y que se están encargando de levantar la obra.

La escuela apenas lleva un par de muros levantados, pero los jóvenes no pueden evitar emocionarse por ver que el plantel ya está comenzando a levantarse y que en unos años podrá ser disfrutado por otras generaciones de estudiantes. Seguramente lo que más les enorgullece es saber que ellos son -en gran parte- responsables de que esto se esté llevando a cabo.