Llegó lo que muchos esperaban… aunque no de la manera en que se esperaba: AMLO dio a conocer el plan con el que pretende que el país reciba el trancazo económico generado por la pandemia del coronavirus.
En un vacío patio del Palacio Nacional, ayer por la tarde el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) dio a conocer el plan que, a grandes rasgos, está basado en inversión pública y reforzamiento de programas sociales dirigidos a los más desprotegidos: “primero los pobres”, dijo hace unos días respecto a lo que hoy presentaría.
El plan fue precedido por un informe de esos trimestrales que se aventó el año pasado y que éste (y los próximos) nos recetará en cuatro ocasiones. Es decir, se la prolongó gacho el cabecita de algodón y eso hizo que la banda se prendiera con lo anunciado. No por no ser necesario, sino porque se esperaba más. Mucho más. Pero bueno, después de ocupar varios minutos para dar su mini “informe de gobierno”, esto fue lo que anunció como parte de su plan económico:
No aumentar los precios de las gasolinas: “Ahora Pemex vende la gasolina en 30 por ciento menos que antes de la pandemia”.
Inversión en servicios públicos: 25 mil millones de pesos adicionales irán para la introducción de agua potable, drenaje, pavimento y la construcción, así como el mejoramiento de 50 mil viviendas en zonas marginadas de 50 municipios del país, “lo cual nos permitirá al mismo tiempo crear 228 mil empleos directos, además de los beneficios a los habitantes”.
Según anunció presidente, el programa Sembrando Vida será ampliado, con ello, 200 mil campesinos tendrán empleo de manera inmediata. “Este año también se entregarán apoyos adicionales a las sociedades de padres y madres de familia para el mantenimiento de 31 mil planteles escolares”, dijo AMLO luego de señalar que 190 mil pescadores del país recibirán apoyos directos.
En más chambas directas, el presidente anunció que la Marina, el Ejercito y la Guardia Nacional reclutarán a 31 mil nuevos elementos. Además, se contratarán a 45 mil médicos y enfermeras para hacerle frente a la pandemia.
En lo que se refiere a créditos, el ISSSTE entregará créditos personales a 670 mil trabajadores del Estado; por su parte, el FOVISSSTE e INFONAVIT tendrán 177 mil millones de pesos para dar créditos de vivienda a 442 mil 500 trabajadores. Esto generará aproximadamente 270 mil empleos.
“Ya rompimos el molde”
No llegó un anuncio espectacular que prendiera los ánimos… y que analistas y políticos esperaban. Según AMLO, porque “ya rompimos el molde que se usaba para aplicar las llamadas medidas contracíclicas que sólo profundizaban más la desigualdad y propiciaban la corrupción en beneficio de unos cuantos”.
Así, el plan de recuperación económica de la 4T dejó fuera la solicitud de más créditos, el rescate de empresas y bancos, apoyos fiscales, aumento en los precios de servicios públicos y la disminución de salarios a trabajadores.
“La fórmula que estamos aplicando para remontar la crisis transitoria, repito, es la suma de tres elementos básicos: mayor inversión pública para el desarrollo económico y social, empleo pleno y honestidad, y austeridad republicana. Nada nos hará regresar al pasado”.
¿Y con qué ojos?
Según informó AMLO, los recursos para su plan serán sacados de los ahorros del Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios… los cuales estaban repartidos en los fideicomisos que el pasado viernes decreto extintos. “También nos apoyaremos en la banca de desarrollo, pero, sobre todo, se seguirá con la misma política de liberar recursos, porque continuará, incluso con mayor rigor, el plan de austeridad republicana”, advirtió el presidente.
Respecto a este apretón de cinturón, AMLO informó que, luego de consultarlo y consensuarlo, otra vez bajarán los sueldos de altos funcionarios públicos… incluso este año se quedarán sin aguinaldo. Esta medida sólo aplicará de subdirectores pa’rriba, hasta el presidente.
Además, se reducirán los gastos de publicidad del gobierno; se reducirá la partida de viáticos, los gastos de operación y se ahorrará más en compras a proveedores y en los costos de las obras públicas que se contratan con empresas constructoras o de servicios.
¿Y ya? Bueno, habrá partida extra para Pemex… y no, no se anunció la suspensión de los grandes proyectos del sexenio: la construcción de Santa Lucía, Dos Bocas y el Tren Maya siguen en pie.
¿Y los empresarios?
De acuerdo con AMLO, para esta primera parte de su plan económico para salir de la crisis cuenta con el apoyo del sector privado. “La semana próxima daremos a conocer un programa de inversión pública, privada y social para el sector energético por un monto aproximado de 339 mil millones de pesos”.
Cerró echándose unas citas históricas que nomás sirvieron para que parte del respetable se la recordara con más enjundia… y así más o menos estuvo el plan que, por lo anunciado, la próxima semana continuará.