A los que todavía no sepan muy bien qué es Supersónico o quién es Tomás Cookman y que se estén preguntando por qué ambos nombres les suenan familiares, podemos decirles que el primero será un festival importante que se llevará a cabo en Los Ángeles el próximo 11 de octubre con bandas como Café Tacvba y Calle 13, mientras que el segundo es un personaje que sabe mucho de música y que ha estado presente de diferentes formas en la escena latina desde hace ya varios años.
En la tradición de grandes festivales como Coachella, Vive Latino y otros similares en los que se convoca a varias bandas para que toquen en diversos escenarios a lo largo de uno o más días al mismo tiempo que se realizan otras actividades relacionadas a la música y al arte, Supersónico llegará este año por primera vez a Los Ángeles como un evento que se enfocará por completo al mercado latino en Estados Unidos.
Cafe Tacvba, Calle 13, Bostich + Fussible, Ana Tijoux, Bomba Estereo, Lizzo, Tokyo Ska Paradise Orchestra, La Vida Boheme, AJ Davila, Los Macaunos, Los Master Plus, Los Rakas, Kita Klane, Maria y Jose, Deorro, Ceci Bastida, Jungle Fire, La Santa Cecilia, Ritmo Machine, Raúl Campos, Anthony Valadez y Subsuelo conforman el cartel de Supersónico, lo cual se consiguió gracias al trabajo de un equipo liderado por Tomás Cookman.
Quienes no conozcan a Tomás Cookman, deben saber que él ha sido mánager de artistas como Los Fabulosos Cadillacs, Manu Chao, Tom Tom Club y Nortec Collective; es el fundador del prestigioso sello discográfico Nacional Records, que ha publicado discos de Bomba Estéreo, Plastilina Mosh y otros; además de estar detrás de la Latin Alternative Music Conference (LAMC), que se hace en Nueva York.
Recientemente tuvimos la oportunidad de platicar con Tomás Cookman sobre el nuevo festival que él organiza, Supersónico, y sobre la importancia que éste puede llegar a tener como un espacio de difusión para el rock y la música alternativa de América Latina en Estados Unidos.
Parecería que con Supersónico se tiene la intención de hacer un festival parecido a Coachella y que estuviera enfocado al mercado latino en Estados Unidos, ¿cómo surgió esta idea?
Lo que tratamos de hacer es por fin construir un festival que sentimos que ya hacía falta en Los Ángeles. Como compañía hemos manejado a diferentes artistas, llevamos 15 años organizando el LAMC en Nueva York y hemos organizado giras por todo el mundo. Se intentó algo parecido una vez en Miami hace uno o dos años, se intentó una vez en California y había una que otra gira, pero jamás se había hecho algo con muchos escenarios, un poco de arte, comida y más. Todo esto nos ha mostrado que sí existe un mercado y que no somos los únicos locos que creemos que estas bandas son increíbles. Cuando hay cosas de tan alta calidad o tan interesantes, a veces el idioma, que obviamente dicta todo, no te cierra una puerta. Ante todo esto dijimos “bueno, hace falta un festival así” y estuvimos hablando sobre eso años y estuvimos mirando varios lugares para hacer el festival. Luego me llamaron mis amigos de GOLDENVOICE, que justo hacen Coachella, me mostraron un lugar para hacerlo y me dijeron que les encantaba el concepto y que lo hiciéramos juntos. Así nació Supersónico.
¿Alguna vez te imaginaste que el crecimiento de la escena latina en Estados Unidos y su importancia sería tal como para organizar un festival de esta magnitud?
Desde la primera vez que vi a Los Fabulosos Cadillacs tocando para un público en Chicago me convencí de que eso no tenía que parar, había que seguir y seguir. Abrimos caminos y pasó algo similar con cientos de bandas que llegaron después, desde Manu Chao, Nortec y Ana Tijoux. Ver cómo han crecido, ver que los apoyan y hablan de ellos es una manera más de decir “sí ustedes tenían razón”, seguimos en la lucha. Si volteas a ver con atención a todas estas bandas latinas, verás que están tocando en los festivales en los que hay que estar como Coachella, Outside Lands y otros, eso es una muestra de la madurez de estos artistas y del mercado también.
¿Cuánto tiempo se ha trabajado en la organización de este festival?
Pues ya llevábamos un rato trabajando en el concepto, planeando dónde y cómo. Ya cuando nos pusimos de acuerdo en hacerlo con GOLDENVOICE, fue desde noviembre pasado. Es muy lindo sentarte en tu casa y pensar en hacer un festival y decir “bueno pongo a esta banda y esta banda y pido dinero de mi tío y busco unos cómplices”, pero en realidad es súper difícil hacer un festival porque hay que tener muchas partes sincronizadas para que esto salga bien. Obviamente hay que elegir a las bandas correctas y el lugar correcto, buscar apoyos sin ser abusivo y tratar de mantener un precio razonable en los boletos. En este primer año yo no quería tener un precio súper alto.
¿Cuál fue el criterio que se siguió para elegir a las bandas que conforman el cartel?
Lo primero obviamente era tomar en cuenta a bandas que están girando con disco, sobre todo hablando de las bandas grandes. Ya tenemos muchos años de experiencia programando bandas que creemos interesantes y nos ha funcionado cuando hemos hecho el LAMC al que el New York Times ha llegado a nombrar como el Sundance de la música latina. Programar es una cosa que por lo menos yo hago todos los días. A final de cuentas también cada banda que está en el cartel es porque me gusta. Quiero vender entradas y quiero mostrar que es un buen negocio para que haya más. Muchas de estas bandas han tocado anteriormente en el LAMC y es importante que ellos sepan que esto es algo para que siga creciendo el mercado. Hay muchas bandas que sí me encantaría meter, pero no tengo el lujo de tener tres días de Vive Latino.
¿Qué contratiempos se han presentado hasta ahora durante la organización de Supersónico?
La gran ventaja para hacerlo fue tener un socio que vive de hacer festivales y no necesité de alguien que nos ubique. Nos sentamos con socios que saben de esto y es fantástico porque hacen cientos de shows de músicos latinos al año. En la parte de organizar festivales los de GOLDENVOICE son los mejores del mundo, estamos con muchas ganas y hay una buena combinación de gente trabajando en esto. Vamos a mostrar que esto no es una locura y que hay un público súper importante al que nos dirigimos.
Además de la música en vivo, ¿qué otras actividades encontrarán los asistentes al festival?
Tendremos arte, un pequeño tianguis, food trucks y el mismo criterio que tenemos con las bandas lo tendremos con la comida. Será toda una experiencia desde que entras hasta el final del día, cuando ya escuchaste a varias bandas. Queremos que sea algo especial.
¿Habrá un streaming en vivo para los que no puedan asistir a Supersónico?
No tendremos streaming en vivo este primer año pero sí planeamos tenerlo en próximas ediciones.
Tal vez sea demasiado pronto para hablar de esto, pero, ¿ya tienes una idea de lo que podrían hacer en una próxima edición del festival?
Ya estamos haciendo los planes para el año que viene y hacerlo de dos noches, también ya estamos hablando del año número tres y del año cuatro. Talento hay más que suficiente y si hacemos un buen festival este año pues la gente se irá con una buena experiencia, si todo sale como debería salir no hay razón por la que esto no dure mucho tiempo. Ya estamos acostumbrados a hacer cosas que duren mucho tiempo, cuando hacemos nuestros proyectos siempre nos gusta pensar a largo plazo y no solamente hacer las cosas una vez.
Así que si viven en Los Ángeles, tienen planes de ir allá en octubre de este año o simplemente tienen ganas y chance de viajar a Estados Unidos para estar en una gran festival con una amplia oferta musical, les recomendamos que se den una vuelta por Supersónico para que se la pasen muy bien.
