Los monumentos pueden ser puntos de reunión o espacios cargados de sentido para sus comunidades. Algunos —como el Mazinger Z de Chimalhuacán— tienen su lado cómico y otros, como la aquella Palma de Paseo de Reforma, cargan con bastante polémica al momento de ser retirados. Otros monumentos en el mundo también representan amistad… que fácilmente podría romperse.
Así es la historia de esta estatua en Finlandia que está armando toda una discusión.
El monumento se llama La Paz Mundial —o Maailman rauhaa, si saben pronunciar el el finlandés—, llegó a Helsinki gracias a un regalo de Rusia en la época Soviética y se ha convertido en el centro de la polémica.
Quitan ‘La Paz Mundial’
De acuerdo con YLE, el medio público de Finlandia, la estatua fue retirada apenas esta semana debido a unos trabajos de construcción. La ciudad de Helsinki espera hacer un camino —similar a una vía ciclista—, en ese espacio. Entonces, tuvieron que quitar el pesado monumento.
La estatua, aunque es un regalo de Rusia, es propiedad del Museo de Arte de Helsinki.
Y es ahí donde está uno de los pleitos, pues el Museo aseguró que el monumento sería transportado a un almacén durante la construcción de la avenida, pero después no quisieron confirmar que regresaría al espacio que ha ocupado durante más de 40 años.
La polémica estatua en Finlandia
Esta estatua llamada La Paz Mundial ha provocado polémicas prácticamente desde que llegó a Finlandia.
Se las regaló Rusia —o la Unión Soviética, pues— en 1989 y fue presentada al público finlandés en 1990, apenas dos meses después de que cayera el Muro de Berlín. Como buena estatua soviética, es un armatoste de casi 7 metros de altura. Representa a personas de todo el mundo deteniendo la figura de un planeta con el puño en alto en señal de la búsqueda de Paz Mundial.
Desde su llegada a Helsinki ha provocado un friego de polémicas.
Apenas cuando llevaba un año, en 1991, un grupo de estudiantes finlandeses le aventó pegamento, aceite y recubrió toda la estatua en plumas. También un incidente en 2010 cuando intentaron hacerla explotar con un tanque de gas.
Sin embargo, los momentos más complicados empezaron hace algunos meses. Según YLE, las protestas por la estatua regalada por Rusia —en miras del conflicto con Ucrania o el pleito con Finlandia por su ingreso a la OTAN— se han puesto de a peso.
Hace unas semanas, el nombre de la estatua fue tachado con aerosol. Originalmente se llama Maailman Rauhaa, pero quien fuera que la pintó le puso Maailman Räyhäa. La diferencia no es mucha, la mera verdad, pero resulta que sí cambia todo el significado pues ya no es La Paz Mundial y ahora es La Locura Mundial.
También, otros manifestantes tuvieron un punto más visible, pues la estatua, desde hace un tiempo, tenía banderas de Ucrania.
En fin, en todos lados se cuecen habas. Mientras acá en México peleamos por monumentos, palmeras o ramas seca…. digo, ahuehuetes, en Finlandia también se agarran a cates por la historia de una curiosa estatua.