¿De quén chon? Estados Unidos y México se pelean por el botín del Chapo

Después de que Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán Loera recibiera una esperada condena de cadena perpetua —aderezada con unos cuantos añitos extra— comenzó a volar la información. Sin embargo, mientras por acá estábamos pensando a qué prisión se iba a ir… los gobiernos de Estados Unidos y de México tienen la mira puesta en algo más importante: ¿quién se va a quedar con su botín?

En su veredicto, la corte de Nueva York multó al Chapo con 12 mil 600 millones de dólares.

Por un lado, Estados Unidos espera que Joaquín Guzmán Loera se caiga con la lana sin complicaciones. De la misma manera que Osiel Cárdenas Guillén —líder del Cártel del Golfo— pagó 50 millones de dólares en 2010 cuando se declaró culpable o cuando Alfredo Beltrán Leiva —conocido como El Mochomo— dio 529 millones de dólares después de ser condenado a cadena perpetua.

El año pasado, El Vicentillo —hijo del Mayo Zambada— acordó pagar mil 373 millones de dólares como parte de su trato, que incluía testificar en el juicio del Chapo.

Mientras Estados Unidos muestra el músculo esperando que el capo sinaloense pague una verdadera millonada, México tiene una idea completamente diferente. Este jueves en su conferencia mañanera, Andrés Manuel López Obrador afirmó que estos recursos deberían de ser pagados a nuestro país. “Escuché al abogado y dijo una cosa interesante: que la confiscación de los bienes, en todo caso, esos recursos, esos bienes, le corresponden a México legalmente. Y se va a revisar el asunto. Estoy de acuerdo con lo que dijo el abogado de Guzmán Loera. Lo vamos a revisar”, mencionaba el mandatario federal.

Bajo la primicia de que la mayoría de los negocios del líder del Cartel de Sinaloa fueron organizados de este lado de la frontera, miembros del equipo legal de la familia Guzmán Loera, aseguraron que al país de las barras y las estrellas no les debería tocar ni un peso.

José Luis González Meza, miembro del equipo legal del sinaloense, afirmó en la conferencia de prensa del miércoles: “La fortuna del Chapo Guzmán, lo que sea, un dólar, mil dólares, lo que sea, se generó en México. La siembra, el cultivo y la cosecha de la amapola y la mariguana se llevó a cabo en México. El dinero del Chapo Guzmán no pertenece al Gobierno de Estados Unidos, pertenece al Gobierno de México”.

¿Y la lana?

Ahí está el detalle. A grandes rasgos, nadie la encuentra y a ver quién es el valiente que se anima a ir a cobrar.

Para empezar, la idea de que el Chapo Guzmán pague 12 mil 600 millones de dólares está basada en una estimación al chilómetro que hicieron las autoridades de Estados Unidos. La cantidad está extrapolada sobre las ganancias que el narcotráfico podría dejar a lo largo de los años que estuvo activo.

Sin embargo, no están contando los gastos o pérdidas que una empresa —no se rían— como el Cártel de Sinaloa tiene regularmente: casas, ranchos, viajes, trocas, aviones, narcotúneles, armas, decomisos, sobornos y miles de personas en la nómina. Además, claro, la lana que ya pasó el proceso de lavado en negocios legales —pónganle comillas— de los dos lados de la frontera.

Encontrar esos negocios y esas propiedades, decomisarlas, obtener su verdadero valor, cambiarlos a efectivo y luego pagar la multa en México o en Estados Unidos se ve verdaderamente canijo.

La versión del Chapo Guzmán

Aunque el Chapo personalmente no dijo nada, su abogado, Jeffrey Lichtman, afirmó que no hay manera de que ninguno de los dos países le pueda cobrar la multa… porque no existe. 

“Es ficción, es parte del show. Llevan décadas buscando sus bienes. Antes de que lleguen a 12 mil millones de dólares, que primero lleguen al dólar número uno. Cuando encuentren el primer dólar me despiertan. En este momento llevan cero. No creo que algún día veremos eso. Es ficción”, mencionaba. “Como no tienen los bienes, no lo sé, chance les puede escribir en un papelito que les debe”.