El gobierno federal ha celebrado con bombo y platillo la captura de Miguel Ángel Treviño “El Z-40”… con el pequeño detalle que no han dado los créditos correspondientes.
De acuerdo a la edición impresa del diario The New York Times, agentes gringos estuvieron involucrados en la detención de “El Z-40”, constando en el reportaje titulado “Captura de jefe criminal en México parece cerrar un capítulo brutal”.
“Autoridades estadunidenses jugaron un papel importante detrás de la detención del Z-40 (…) y posteriormente, confirmaron su identidad a través de pruebas biométricas y de ADN”, señalan los autores de dicho reportaje, Randal C. Archibold y Ginger Thompson.
Realizada la madrugada del 15 de junio, la captura del capo se llevó a cabo por la Secretaría de Marina “tras varios meses de compartir información” con los Estados Unidos, relacionada a viajes que el líder criminal realizaba a Nuevo Laredo para visitar a uno de sus hijos. No obstante, hasta el momento ninguna instancia del gobierno mexicano ha reconocido la ayuda estadunidense.
Lo anterior quizá se deba a que la administración de Peña Nieto quiere aparentar una autosuficiencia en la lucha contra el crimen organizado, esto según las palabras de un funcionario anónimo que ha estado presente en reuniones sostenidas con sus homólogos en la Ciudad de México, el cual fue entrevistado por el diario neoyorquino: “Lo que tengo de esa reunión es que México quiere demostrar que puede manejar esa lucha por sí mismo, o por lo menos bajo sus propias condiciones”.
A pesar de que la detención de Treviño supone un duro golpe para la organización delictiva más sanguinaria del país –los Zetas-, el medio norteamericano advierte lo que muchos en nuestro país ya se esperan:
“El peligro es que el descabezamiento de Los Zetas fragmentará la organización en pequeñas pandillas que ocupen las mismas técnicas para extorsionar y traficar con drogas”.