Alguna vez, en mi más tierna infancia, los Reyes Magos me trajeron un juego de bádminton Mi Alegría. Hasta traía unos gallitos que brillaban en la obscuridad. Pase horas y horas de sana diversión jugando con mis amigos. Quizá por eso siempre relacioné este deporte como leal y honesto, hasta hace unos momentos, cuando me enteré que hay sospechas de corrupción en el bádminton olímpico.
Resulta que por medio de un comunicado, la Federación Mundial de Bádminton acaba de anunciar que acusó a ocho jugadoras de este deporte (incluidas las dos chinas campeonas del mundo), por ‘dejarse perder’ en sus enfrentamientos preliminares y así ubicarse en llaves más favorables durante el torneo olímpico. Las deportistas señaladas ya fueron expulsadas de la competencia.
Las jugadoras implicadas pertenecen a los equipos de dobles de China, Corea del Sur e Indonesia, a las que se les acusa de violar el reglamento de conducta, que en uno de sus estatutos señala que debe sancionarse a todo competidor o equipo que “no ejerza el mejor esfuerzo posible a fin de ganar un partido” o “se conduzca de una forma que constituya claramente un abuso o vaya en detrimento del deporte”.
Dicen que fue tan obvio, que incluso los espectadores de la Arena de Wembley abuchearon a las deportistas chinas en su duelo contra Corea del Sur, pues erraban sus tiros de forma aparentemente deliberada. También se dedicaron a estrellar el gallito contra la red y a cometer errores increíbles. El intercambio de juego más largo que tuvieron en el primer game fue de únicamente cuatro golpes, por lo que el juez tuvo que hacerles una advertencia al que las jugadoras no hicieron mucho caso.
China perdió por 21-14 y 21-11 en medio de reclamos de la afición. En un momento pareció que todos hacían su mejor esfuerzo por perder.
El día de ayer el equipo surcoreano ya se enfrentó a un interrogatorio por parte de la audiencia. Se espera que las jugadoras chinas e indonesias lo hagan a la brevedad. Las duplas implicadas debían competir hoy por la tarde en la instancia de cuartos de final.
El Comité Olímpico Internacional dejará que sea la Federación Mundial de Bádminton la que se encargue del caso. “Tenemos plena confianza en que la federación dará los pasos necesarios. Ellos tienen la experiencia para lidiar con casos semejantes “, señaló Mark Adams, portavoz del organismo.
Por lo pronto, Gayle Alleyne, portavoz de la Federación Mundial de Bádminton se ha negado a dar declaraciones sobre los castigos que podría imponer la audiencia.
Los equipos se declaran inocentes, y atribuyeron el problema a la implementación del formato de “todos contra todos” que sustituyó a la eliminación directa. Una derrota en el nuevo esquema permite que la pareja derrotada tenga un partido más sencillo en la siguiente ronda. La delegación de Indonesia ya apeló la sanción.
¿Cómo ven, culpa del reglamento o realmente hubo mala intención?