Las urnas cerraron a las seis de la tarde. Unos minutitos después, Alfredo del Mazo y Delfina Gómez se declararon ganadores en la disputa por la gubernatura del Estado de México. Los dos ganaron, al menos eso es lo que afirmaban entonces. El sopetón llegó pasaditas las nueve. Pedro Zamudio, presidente consejero del Instituto Electoral del Estado de México, leía los resultados del conteo rápido: el candidato priista aventajaba a la abanderada de Morena por una “diferencia técnicamente significativa”. Lo que al principio parecía una pose y puro bluff terminó materializándose en una virtual —y disputada— victoria para el PRI. Las postales del horror llegaron después. Vimos a Enrique Ochoa Reza festejando el triunfo del gallo priista. Nos recetamos el discurso con el que se regocijaba de la derrota del “populismo autoritario”. A Del Mazo Maza, con sus manera acartonadas, lo vimos celebrar en un auditorio semivacío con una comilona y hasta mariachis.
Lo que ya no vimos fue lo que reporta hoy el diario Reforma. La publicación indica que horas después de que se presentaran los resultados del conteo rápido, el virtual ganador de los comicios y el actual gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila, se enfilaron hacia la residencia oficial de Los Pinos para celebrar con el mismísimo presidente Enrique Peña Nieto. En la reunión se encontraban Miguel Ángel Osorio Chong, José Antonio Meade, José Narro Robles, el almirante Vidal Francisco Soberón, además de los titulares de las secretarías de Turismo, Medio Ambiente y Trabajo. De acuerdo con la publicación, en uno de los salones de la residencia se instaló una pantalla para ver los resultados delPrograma de Resultados Preliminares (PREP). El sentimiento era de alegría por haberla librado “haiga sido como haiga sido”.
Nada dice elección de Estado como irte a celebrar con el gobernador a la casa del presidente después de ganar. https://t.co/pvNelrzmRr
— Esteban Illades (@esteban_is) 8 de junio de 2017
Según testigos del encuentro, el presidente Peña Nieto se notaba contento por no haber perdido las elecciones en su tierra natal y bastión principal del PRI. “No importa que ganáramos con lo que fuera, lo importante era ganar esa entidad. Por las otras no había preocupación”, dijo un funcionario de los que estaban presentes, según el diario. Los asistentes apuntaron que es casi imposible que Del Mazo pierda la gubernatura en el recuento de casillas o en los tribunales. La versión de Reforma indica que el mandatario no realizó convocatoria alguna para organizar la reunión, sino que asistir a Los Pinos fue pura iniciativa de los secretarios. El pachangón habría terminado cerca de las 4 de la mañana del lunes. El presidente Peña Nieto, “pariente en octavo grado” de Del Mazo, todavía no se ha pronunciado sobre el virtual triunfo de su primazo.