Seeeeeee… un error. Y un error que podría considerarse “un accidente feliz”… muy feliz (para el gobierno de Zelenski). Hace un mes, el Pentágono hizo sus cuentas y aceptó que, por un error de contabilidad, sobreestimó el valor del apoyo militar enviado Ucrania. Ahora, parece que revisaron con más detalle las cuentas y el error fue del doble.
Como cuando se calcula cuánto fue de los tacos y, hasta que cae la cuenta, uno ve que los precios eran menores, porque se pidieron sin queso (y, entonces, se pudo haber pedido otra orden)… así más o menos el Pentágono:
De acuerdo con la subsecretaria del Prensa del Pentágono, Sabrina Singh, el error ocurrió porque los oficiales encargados del presupuesto contaron el valor para el reemplazo de las armas, en lugar de sólo el valor real de éstas. Un pequeño detallito que, según la funcionaria, ocurrió en varias ocasiones.
“En un número significativo de casos, los servicios utilizaron los costos de reemplazo en lugar del valor contable neto, sobreestimando así el valor del equipo retirado de las existencias de Estados Unidos y proporcionado a Ucrania”, señaló Singh.
Hablando en pesos, bueno, en dólares, lo anunciado ayer, 20 de junio, por el Pentágono hará que el gobierno de Joe Biden tenga libres no los 3000 mil millones de dólares que se pensaba hace un mes… el pequeño error de contabilidad es de 6000 millones.
“Hemos confirmado que para el año fiscal 2023, el cálculo final es de $3600 millones, y para el año fiscal 2022 es de $2600 millones, para un total de $6200 millones”, desglosó Singh.
Error de contabilidad del Pentágono que tiene su lado positivo… y negativo
Siguiendo con analogías baratas, el error de contabilidad es como cuando uno se encuentra un billete en el pantalón. Y ese es el lado positivo del asunto: al parecer, ahora que se detectó que el valor de las armas fue mayor al real, ya no habrá necesitad de que el Congreso apruebe un paquete adicional de ayuda para Ucrania… al menos no hasta septiembre. Para qué con 6000 millones que ya se tienen libres.
Pero también está el lado negativo… y ése fue señalado desde hace un mes (cuando la cuenta apenas dejaba el error de contabilidad en 3000 millones): el error redujo significativamente el apoyo que Estados Unidos destinó a Ucrania antes de la contraofensiva. Es decir, se pudo haber hecho más.
“Estos fondos podrían haberse utilizado para suministros y armas adicionales para la próxima contraofensiva, en lugar de racionamiento de fondos para el resto del año fiscal”, reprocharon en su momento (hace un mes) los presidentes de las comisiones de Asuntos Exteriores y de Servicios Armados, ambas de la Cámara de Representantes.
Pues ahora sí que ya ni modo. De acuerdo con medios internacionales, la morrallita que dejó el error de contabilidad del Pentágono queda, ahí, para ser reasignado en futuros paquetes de ayuda militar… ya sin necesidad de contar con la aprobación del Congreso.
