18 de noviembre de 1999.
Mientras México se preparaba para la susodicha ‘transición democrática’ que vería al PRI entregar por primera vez la presidencia de la República a un partido de oposición y el mundo se veía amenazado por un colapso llamado ‘Y2K’, al interior del Teatro Metropolitan, tres mil personas disfrutábamos de la primer presentación de Blur en México.
4,841 noches han transcurrido desde aquél mítico concierto. Sabemos que el mundo se las ingenió para sobrevivir al Y2K y otras predicciones apocalípticas. Blur se separó, se reunió, se volvió a separar y se reunió de nueva cuenta, mientras que el PRI entregó y regresó a la presidencia de este país.
Es el sábado 16 de Marzo y mientras miles de personas se desgarran la voz al lado de Los Ángeles Azules cantando “Cómo te voy a olvidar”, un emisario nos avisa que Blur, de último momento, decidió otorgar una entrevista para Sopitas.com… ¡en 10 minutos!.
Esta fue mi reacción.
Sin saber si entrevistaríamos a Damon, Graham, Alex o Dave, nos instalamos en un camerino del Foro Sol, en espera de conocer nuestro futuro.
Alex James es el primero que entra al salón y se sienta para hablar con Reactor 105, seguido de Dave Rowntree que hace lo propio con Ibero 90.9FM. ¡Graham Coxon era nuestro hombre! Entró a la habitación y se dejó caer sobre uno de los sillones, pidió un poco de agua pero sobre todo un poco de aire y espacio, antes de comenzar con la entrevista.
En su camino hacia el lugar de la entrevista, Graham había echado un vistazo a la pista del Foro Sol y ciertamente, estaba entre impresionado y nervioso por lo que podría ocurrir en las próximas dos horas.
“El mundo ha cambiado mucho en los últimos catorce años” nos dice Graham Coxon, después de asomarse a la pista del Foro Sol y encontrarse con una multitud que espera la presentación de Blur en el festival Vive Latino 2013.
“Parece que lugares como México, Japón o Sudamerica están llenos de jóvenes hambrientos de música” nos dice Graham cuando le preguntamos sobre los motivos del grupo para aventurarse (finalmente) a una gira por diversas partes del mundo, tras amagar con un par de regresos, que culminaron con tres memorables conciertos en el Hyde Park de Londres.
“Ahora, es mucho más fácil poder tocar en países en los que hace algunos años no era tan común para bandas como nosotros, y es genial porque no solo nos permite saludar a aquellos fans que nos han acompañado desde hace muchos años, sino que además, pareciera que estamos conectando con una nueva generación de jóvenes que parecen estar interesados en nuestra música.”
Mi primer y único contacto con Graham Coxon -hasta antes del sábado- ocurrió la noche previa a su presentación en el Teatro Metropolitan en 1999. Yo era un chalán en Radioactivo 98.5 cuando los cuatro integrantes del grupo llegaron a las instalaciones de la estación para poner sus canciones favoritas, y si bien suena como una gran idea, la realidad es que cuando vimos que ninguno de los integrantes cruzaba miradas o palabra alguna entre ellos, la entrevista especial, terminó por convertirse en uno de los momentos más tensos que me haya tocado presenciar.
“La última vez que estuve en México, era el fin de los noventa… y no sé, no creo que los noventa hayan sido realmente tan positivos como mucha gente cree. Me da la impresión de que hoy en día hay mucho más respeto, cariño y agradecimiento entre los músicos que formaban parte de ese circuito de bandas que conformaron el ‘britpop’, y que en su momento siempre parecían estar……..mmm, no se……..mmm… un poco negativos por así decirlo, y nosotros estábamos muy muy muy cansados hacía el final de los noventa y creo que todos necesitábamos un descanso; pero claro, siempre es difícil poder tomar un descanso y eso nos complicaba un poco.
Pero ahora puedo decir que Blur se ha vuelto de nueva cuenta un placer para todos, porque es lo que queremos hacer y de alguna forma no sentimos la presión de hacer cosas que no queremos hacer, lo cual nos hace muy felices porque entonces hacemos las cosas por el gusto que representa y no por alguna obligación”.
Pero ¿será que el placer pueda hacer que finalmente Damon Albarn, Dave Rowntree, Alex James y Graham Coxon regresen al estudio para entregarnos un nuevo disco de Blur en los próximos meses?
“Por ahora solo queremos tocar en vivo. Yo estoy bien, todos estamos bien, creo que todos… mmm….sentimos esa….mmm…necesidad de ser creativos, pero no hay ningún plan para grabar juntos, aunque lo hemos hecho, y creo que solo es cuestión de darle tiempo y llegar a un punto en donde todos nos sintamos con la libertad de comprometernos a un gran periodo de grabación como banda, pero la verdad es que todavía no llegamos ahí.”
Durante la ausencia de Blur, sus integrantes se dedicaron a sacar proyectos personales. Dave Rowntree apostó por una efímera carrera política con el Partido Laborista del Reino Unido. Alex James fundó una granja en la que se dedica a producir quesos, en tanto que Damon Albarn y Graham Coxon se mantuvieron vigentes en la escena musical; Damon con proyectos como Gorillaz, Mali Music, o The Good The Bad & The Queen, por mencionar algunos y Graham con su carrera solista, que le ha visto editar hasta el momento ocho discos.
“La verdad es que tengo listo un disco terminado y tendría que aventar todos los cerillos al fuego, pero no será este año. Creo que tanto Damon como yo siempre tratamos de pensar más allá de donde estamos, musicalmente hablando, y me encantaría presentar mis discos en México, pero desgraciadamente el dinero no alcanza”.
Interrumpo para decirle que en México seguramente habría muchos fans dispuestos a ‘fondear’ esos conciertos. ¿Viste la reacción del público cuando tocaron ayer en El Plaza? ¿Ya viste toda la gente que está allá fuera esperando ver a Blur?
“Si, ya me asomé y ver tanta gente me dejó mareado, jaja. La verdad es que ayer en la noche fue un gran concierto, el ruido de toda la gente que estaba ahí cuando subimos al escenario era de escalofrío. La gente fue increíble y lo que platicábamos hace rato, había personas de todas las edades, y eso es muy alentador”.
En repetidas ocasiones, muchos críticos han señalado que parte del éxito que llegó a tener Blur a mediados de los noventa se debía a la sensibilidad que tuvo el grupo para convertir aquellas escenas de la vida cotidiana de cualquier británico en grandes melodías, como ‘Parklife’, ‘Sunday Sunday’ o ‘Jubilee’, y si bien es cierto que el “el mundo ha cambiado mucho en los últimos 14 años”, también es cierto que hay situaciones que parecen repetirse. ¿Cómo se siente el grupo al ver que las letras que escribieron hace veinte años, sigan describiendo los sentimientos de una nueva generación?
“A mí me pasaba mucho con las canciones de The Beatles y con The Kinks, conectaba mucho con sus letras, con sus melodías, y creo que más bien al ser humano le gusta cantar sobre sus experiencias, y más bien son las experiencias las que no cambian mucho entre las personas; todo mundo ha ido de compras, todo mundo en algún momento se ha sentido melancólico o ha estado enamorado. Muchos jóvenes no tienen con quién platicar sus traumas y encuentran en la música la mejor forma de expresar sus sentimientos, y de saberse comprendidos por alguien más, y creo que eso es lo que nos ha hecho conectar con una nueva generación”.
Sin embargo, Blur no es la única banda que ha extendido su legado a otras generaciones, apenas el año pasado pudimos presenciar el regreso de Pulp y en unas cuantas semanas, los Stone Roses se estarán presentando en México, Coxon responde que “esto puede permitir que muchas bandas se reconcilien y que entre ellos se perdonen las heridas que llevaban guardando durante años… Y creo que también ésa es una de las razones por las que quería regresar a Blur, arreglar las cosas con todos y ver que todo saliera bien, porque a veces es penoso voltear a otras bandas y encontrarse con todos esos dimes y diretes y es triste. Creo que dejar atrás todo eso es lo que más gusto me da de estar con Blur”.
Se terminó el tiempo, Graham, Alex y Dave regresan a su camerino para cerrar el segundo día de actividades del Vive Latino 2013. Las nauseas se convirtieron en sonrisas, pero sobre todo en incredulidad al ver a más de sesenta mil personas no anglosajonas cantar todas y cada una de sus canciones.
“No queríamos quedarnos atascados en el Reino Unido, por eso decidimos dedicar este año a tocar en otros lugares a los que no habíamos ido en mucho tiempo.”
Tal y como ocurrió hace casi catorce años, Blur nos regaló otra de esas noches para recordar. Tal vez Graham tenga razón al decir que “el mundo ha cambiado mucho en los últimos 14 años”, aunque hay sentimientos y sensaciones, que nunca cambiarán.