Daniel Johnston es más que un músico simbólico de las pasadas décadas, es más que un individuo que sufre de diversos trastornos psicológicos… Daniel Johnston es una de los artistas visuales más directos y sinceros que ha logrado plasmar en papel lo que es imposible explicar con palabras.
Con motivo de dar a conocer el trabajo gráfico que Daniel ha creado desde hace más de 30 años, la editorial Sexto Piso reeditó este año un fabuloso libro que recopila ilustraciones que el músico ha hecho a lo largo de su vida, así como textos de Philippe Vergne (director del Museo de Arte Contemporáneo de Los Ángeles), Harvey Pekar (guionista de comics fallecido en 2010) y Jad Fair (cantautor integrante de Half Japanese), quienes dan sus propias teorías de lo que esconden las creaciones del músico.
Conocer y apreciar el trabajo de alguien como Daniel no es sencillo. Con una vida repleta de altibajos emocionales y físicos, el artista californiano decidió utilizar la música y el dibujo como una forma de “escapatoria” de la difícil realidad y eso es justamente lo que encontramos en el libro “Daniel Johnston por Daniel Johnston”, que recopila cientos de obras cronológicamente para ayudar a que cualquiera que lo vea pueda tener una idea mucho más clara de los cambios personales que Daniel ha tenido durante los pasados años.
Entre la infinidad de peculiares personajes que podemos encontrar en las obras de Daniel, hay 6 tipos que son los más recurrentes y que podemos ir viendo su notorio cambio con el paso del tiempo, además de que cada uno tiene su específica labor para ayudar a Daniel a expresarse:
– La rana “Jeremiah the Innocent” – un alter ego encierra la inocencia de de Daniel
– El pato – un ente de bondad que recorre las obras de Daniel tratando de alejar a los demonios
– El fantasma “Gasparín” – uno de los primeros alter egos de Daniel que va poco a poco conociendo el mundo
– El boxeador “Joe” – un hombre común que trata de derrotar todos los demonios y monstruos que atormentan a Daniel
– Superhéroes – famosos héroes de historietas (como Hulk y Capitán América) que pelean constantemente con los temores de Daniel
– El diablo – además de todos los demonios que acosan constantemente a Daniel, Satanás juega un papel muy importante dentro de las obras del artista. El diablo es un personaje que está presente desde los primeros dibujos de Daniel y es una pieza clave para entender todo lo que le atormenta desde hace años.
Cualquiera que alguna vez haya escuchado una canción de Daniel sabe que dependiendo la época en la que fue compuesta o grabada, el estilo y la intensidad del tema refleja gráficamente lo que sentía y quería el músico en determinado momento. Lo mismo sucede con cada una de las pinturas de Daniel, desde detalles tan sencillos como los colores y los trazos hasta pequeñas pistas como la forma en que cada obra está firmada.
Cada uno de los dibujos que hay en “Daniel Johnston por Daniel Johnston” son una clara muestra del sufrimiento, alegría, enojo, desinterés, amor y desesperación que Daniel ha sentido a lo largo de su vida hasta llevarlo a lo que es hoy en día: un bello artista incomprendido por muchos y adorado por muchos más.
Entre las obras de Daniel, algunas de las que más destacan son los homenajes a sus héroes caídos (Buddy Holly), los duelos interminables entre el diablo y los héroes, dibujos tomados directamente de antiguos cuadernos y las obras que reflejan claramente ciertos momentos personales de la vida del artista (haber perdido un concurso de talento, peleas con sus padres, conocer a alguien, etc).
Para dar un último vistazo dentro de la mente de Daniel, el libro incluye una entrevista hecha a Daniel antes de un concierto en Filadelfia en 2008 que sirve como prólogo para cada una de las secciones de la publicación y que complementan los textos de Philippe, Harvey y Jad.
“Daniel Johnston por Daniel Johnston” es la obra perfecta para acabar de tratar de entender de una vez por todas lo que sucede y ha sucedido dentro de la mente de uno de los artistas más originales, gráficos y directos de los últimos años. Al igual que con su música, cada uno de los dibujo habla por sí mismo y nos va ayudando a formar el rompecabezas que es la menta de Daniel Johnston.
