En plena tarde y con varios vacacionistas regresando a sus casa, así fue el escenario en el que supuestos miembros del Cártel de Jalisco Nueva Generación emboscó a un convoy de agentes de la Fiscalía General de Jalisco.
Suman 23 personas muertas por el enfrentamiento ocurrido ayer en la carretera libre a Puerto Vallarta, cerca del crucero de Soyatán, en el municipio de San Sebastián del Oeste.
Del enfrentamiento armado se tiene un saldo extraoficial de al menos 16 uniformados fallecidos. Por su parte El País informa que se consiguió la detención de cuatro personas.
Los hechos ocurrieron alrededor de la 15 horas, en la carretera que va de Mascota a Las Palmas, a la altura del poblado de Sayotán, punto en el que un comando armado disparó en contra de un convoy de la Fuerza Única Jalisco (FUJ), el cual se dirigía hacia Guadalajara.
Aunque el incidente lleva varias horas de sucedido, aún la información es muy dispersa. Por ejemplo, extraoficialmente se señala que los agresores utilizaron varios vehículos –unos en llamas- para bloquear la vialidad, con el fin de que los elementos de la FUJ estuvieran a merced del ataque, el cual se dio desde los cerros.
Aunque la Fiscalía General de Jalisco vinculó la agresión con el atentado que hace unos días sufrió Alejandro Solorio Aréchiga, comisionado de Seguridad estatal, los medios también mencionan la muerte de Heriberto Acevedo Cárdenas “El Gringo”, unos de los líderes del grupo criminal, como posible detonante del ataque.
“Es importante informar que tras el atentado efectuado el pasado lunes 30 de marzo en el municipio de Zapopan en contra del comisionado de Seguridad de Jalisco, Alejandro Solorio Aréchiga, la Fiscalía General del Estado tiene bajo investigación a 15 presuntos implicados en dicho atentado, cuatro del los cuales fueron puestos a disposición de la PGR (…) La Fiscalía tiene como principal línea de investigación que los hechos del día de hoy constituyen una medida reactiva tras los hallazgos de la investigación y detenciones en torno al atentado”.
De hecho, el ataque contra Solorio Aréchiga fue la respuesta a la muerte de “El Gringo”, pero antes de esos acontecimientos –el pasado 19 de marzo- ya se había atacado a un convoy de la Gendarmería Nacional. De esta agresión, se tuvo un saldo de cinco policías y cuatro civiles fallecidos.
Jalisco es uno de los cuatro Estados que el presidente de México, Enrique Peña Nieto, priorizó implementar su estrategia de seguridad nacional. No es para menos: desde marzo de 2013, más de 70 funcionarios han sido asesinados en el estado.
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