Uno pensaría que la vida de un columnista de pesca es aburrida. Escribir sobre las horas y horas que pasa esperando a que algún pescadillo muerda el anzuelo debe ser un tanto monótono. Sin embargo, uno de estos periodistas recientemente encontró un raro espécimen en el mar… lo malo es que se lo quitó un tiburón.
El Australiano Al McGlashan, columnista de pesca del Daily Telegraph, y que también se dedica de forma profesional a la pesca vivió el sueño de cualquier pescador: encontrarse con un calamar gigante. Se dice que los avistamientos de estos míticos seres de gran tamaño son verdaderamente extraños. Incluso en la antigüedad abundaban las leyendas de embarcaciones atacadas por estas criaturas.
Por eso, cuando el pasado fin de semana McGlashan navegaba frente a la costa de Nueva Gales del Sur, en Australia, y se topó con el cadáver de un calamar gigante supo que se hallaba ante algo extraordinario.
El pescador y columnista pensó en subir el cadáver de casi 4 metros de largo a la embarcación, pero debido a su tamaño y peso le resultó imposible. Cuando se metió al agua grabarlo e intentar jalarlo desde ahí, apareció un tiburón que le arrebató la presa.
Lo bueno es que lo grabó y fotografío para que sus colegas le crean. Lo malo es que ya no podrá prepararse el coctel de calamar que tenía planeado para cenar. Según especialistas, por el color de la carne del calamar, éste debió de haber muerto poco antes de que McGlashan lo encontrara. Se piensa que pudo haber sido asesinado por una ballena o bien haber muerto por causas naturales.
Ni modo, el Tiburón se puso más abusado… ahora sí que “se lo llevó, se lo llevó el Tiburón”.
Este es el segundo ‘encuentro fantástico’ que en poco tiempo tiene un periodista-pescador con alguna rareza marina. Hace sólo dos semanas Angler Mark Sawyer, editor de 53 años del Angling Times se encontró con este raro pescadote al que llamó ‘Frankenfish’:
Vía Telegraph