Seeeeeeee, nuevamente las instalaciones de la UNAM son blanco de actos vandálicos por parte de personas encapuchadas. Esta vez fue en la Dirección General del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH). ¿Por?
Hasta donde se sabe, las personas que llegaron a tomar las instalaciones de la dirección general del CCH (y vandalizarlas, para no variar) tenían como consigna protestar por los casos de abusos a los que las autoridades de la UNAM no han puesto atención… y también por el asunto de las becas estudiantiles (asunto que – según – la Universidad cubrió con recursos propios, pero, aun así, ha causado descontento entre la comunidad).
Según el reporte de Proceso, además de tomar las instalaciones universitarias, los encapuchados bloquearon avenida Insurgentes Sur en ambos sentidos. Esto mientras sostenían mantas alusivas a la protesta.
De acuerdo con el comunicado emitido por la UNAM, fueron alrededor de 40 personas las que irrumpieron en las instalaciones. Además de la Dirección General del CCH, también se tomó la Dirección General de Presupuesto, ambas localizadas en Ciudad Universitaria.
“Los y las encapuchadas rompieron los cristales, cortaron cables de electricidad e internet, así como las protecciones de ventanas. Dañaron equipos de cómputo, electrónico, de fotografía, de video, y mobiliario en general de las oficinas de las dos direcciones”, acusó la UNAM.
Las autoridades universitarias acusan que, además de los daños antes señalados, los encapuchados retuvieron en contra de su voluntad a personal administrativo. Un acto que bien podría considerarse como secuestro y del que los trabajadores fueron víctimas por varias horas.
“Se está verificando si hubo sustracción de equipo o materiales”, agregó la máxima casa de estudios en el comunicado en el que, pese a todo, no se dan señales de que se vaya a proceder legalmente contra los responsables.
En su comunicado, la UNAM lo único que hace es condenar los hechos vandálicos y el daño al patrimonio universitario y hasta ahí.
“Bajo el principio de que una protesta no puede ser justificación para realizar actos propios de organizaciones criminales y que en el fondo pretenden desestabilizar a la Universidad”, acusa la UNAM.
Por cierto, la Universidad asegura que durante todo el tiempo que duró la toma de las instalaciones de la Dirección General del CCH, se intentó entablar diálogo con los encapuchados. Sin embargo, estos rechazaron la oferta.
