A los venezolanos parece que el destino los está alcanzando. Como parte de un programa para regular la compra de productos de consumo básico, el gobierno implementará a partir de este 30 de noviembre la lectura de biométricos en supermercados, con lo que se pretende detectar y registrar “prácticas irregulares” de los consumidores. Los llamados “captahuellas” se utilizarán en todos los supermercados para “sólo” controlar las ventas de 23 productos de la canasta básica, tales como arroz, leche, papel higiénico, aceite, tabón, detergente y diferentes tipos de carne.

Andrés Eloy Méndez, superintendente de precios, señaló que el sistema se establecerá primero en ocho estados venezolanos: Apure, Táchira, Falcón, Sucre, Bolívar, Amazonas, Gran Caracas y Zulia, de hecho en este último desde hace dos meses se aplica como plan piloto y se cuenta con el registro dactilar de 22 mil personas, además que se espera que para mediados de septiembre el 100% de las tiendas cuenten con el sistema lector de huellas.

El sistema no fija restricciones en la compra de productos… pero sí en la frecuencia: sólo una vez por semana… además de no permitir compras consideradas “excesivas”: “Si alguien acude a comprar 35 kilos de harina, eso no es normal. Pero en una familia pueden ir todos los miembros a comprar“, señaló Méndez. Aunque puede parecer un tanto limitante esta nueva forma de compra, el superintendente le ve el lado positivo, afirmando que con la identificación de quienes compran “en exceso” se han logrado disminuir las filas de los establecimientos.

Como era de esperarse, la inconformidad por esta medida se ha hecho ver en las calles. Este lunes, nuevamente grupos de manifestantes tomaron la ciudad de San Cristóbal para mostrar su rechazo a los “captahuellas”, denunciando que se trata de una forma de racionar la compra de alimentos, muy al estilo de la “libreta” que se utiliza en Cuba, para controlar la escasez de alimentos y productos de consumo básico.


Obviamente lo anterior es desmentido por el gobierno, que justifica el registro de los consumidores como una forma de atacar el contrabando y la reventa ilegal de productos, antes la evidente escasez de ellos: “No se dejen manipular por la manipulación de la derecha. El captahuella no es para restringir compras, es para capturar contrabandistas (…) [el sistema] se aplicará para identificar a quienes juegan, roban y se lucran con los alimentos del pueblo. ¡Vamos tras las mafias!”, señaló el vicepresidente, Jorge Arreaza.

Aun con lo anterior, San Cristóbal –cuna de los más agresivos levantamientos antigubernamentales- ha sido el escenario de enfrentamientos entre manifestantes y policía, la cual ha hecho uso de tanquetas, gases lacrimógenos y fuerza excesiva para derribar las barricadas que levantan los que protestan con la medida que limita la adquisición de productos, además de otras disposiciones, como el aumento del transporte público, la inseguridad y también el cierre de la frontera con Colombia.

“La medida presume que todos los consumidores llevamos a cabo conductas ilícitas (acaparamiento, reventa, etc), y la solución es limitar el consumo para evitarlas. El gobierno no puede imponer una medida suponiendo que los consumidores van a cometer un ilícito. El sistema biométrico nos convierte a todos en sospechosos y eso viola la presunción de inocencia y el principio general de buena fe”, denuncia el constitucionalista, José Ignacio Hernández.

Además de la regulación de alimentos en supermercados, el gobierno venezolano en el futuro pretende establecer vigilancia en aeropuertos, con respecto a las divisas: “Estamos haciendo la colocación del captahuellas para quienes se les otorga las divisas para que la moneda extranjera sea habilitada en el momento en que va a salir del país y no en un procedimiento previo de oficina”, comentó la fiscal general, Luisa Ortega Díaz.

Aunque los dueños de supermercados no se oponen a la medida, sí han expresado la falta de información, ya que hasta el momento no saben si el uso de captahuellas es voluntario u obligatorio, esto debido a las declaraciones contradictorias del presidente Nicolás Maduro, quien inicialmente señaló que era obligatorio y después suavizó la situación al informar que la implementación del captahuellas era voluntario. Otro punto a aclarar es la procedencia de los lectores, los cuales serán vendidos a los comercios

“Mensualmente la Superintendencia de Precios Justos recibirá la base de datos de los productos vendidos y se someterá a revisión aquellos números de cédula de identidad que registren más compras (…) Ellos tomarán decisiones si llamarán a esas personas y le preguntarán por qué están comprando más”, explicó Luis Rodríguez, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Supermercados Autoservicios y Afines, (ANSA).

No será de extrañar que muy pronto tengamos noticias sobre más y más duras protestas en Venezuela.

@plumasatomicas

*Vía El Universal (Venezuela), El Nuevo Herald, NTN24, Reporte Índigo

Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com

Fundé Sopitas como hobby y terminó siendo el trabajo de mis sueños. Emprendedor, amante de la música, los deportes, la comida y tecnología. También comparto rolas, noticias y chisma en programas...

Comentarios