Y llegó el día. Como si se tratará de la lista de convocados al Mundial, así fue el informe que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) ofreció en voz de su titular, Juan José Guerra Abud, respecto al derrame de 40 mil metros cúbicos de químicos provenientes de la minera Buenavista del Cobre de Grupo México, sobre las aguas del río Bacanuchi: es decir, ya se sabía la mayoría de lo que se iba a decir… pero por ahí se podía colar una sorpresa…
Pero no.
Aunque lo ocurrido en el río Bacanuchi y Sonora es “el peor desastre ambiental de la industria minera del país”, producto de un “descuido” de la empresa y que se tiene a 24 mil personas afectadas, Guerra Abud señaló que Buenavista del Cobre no puede ser clausurada… ni siquiera de forma temporal, pero sí multada con muchos miles de millones de pesos y con la obligación de remediar el daño.
El hecho de no poder sancionar más que económicamente a la empresa, se debe a que la ley ambiental del país es blanda, comentó el de la Semarnat, ya que aunque la minera perteneciente a Grupo México incurrió en irregularidades, como el achacar el accidente a causas naturales –según ellos el percance se debió a lluvias arriba de la media-, realmente el derrame fue por el “mal diseño que se hizo” de las instalaciones de la minera… pero, pues quien tiene la facultad de quitar la concesión es la Secretaría de Economía a cargo de Ildelfonso Guajardo, con quien ya se han tenido pláticas, pero nada más de cuánto le pueden sacar a de ganancia al asunto sin tocar la posible cancelación de la minera perteneciente al grupo de Germán Larrea.
Otro punto en contra de Buenavista del Cobre fue la demora con la que “alertó” del desastre: el incidente ocurrió el 6 de agosto, al siguiente día los habitantes de la localidad dieron aviso a Protección Civil, pero fue hasta el día 8 cuando la minera notificó a las instancias federales… y formalmente hasta cuatro días después del accidente.
Hasta el momento -informó David Korenfeld, titular de la Conagua- se han realizado mil 20 análisis a las aguas de los ríos sonorenses, con los que se ha determinado la presencia de químicos‘‘fuera de las normas ecológicas y de salud, así como del estado de la calidad del río previo al derrame’.’ Los elementos que forman parte del cóctel tóxico presente en las aguas del río Bacanuchi y Sonora son: arsénico, cadmio, cromo, plomo, cobre, aluminio y fierro.
Además, se dio parte de las afectaciones a la salud que el derrame ha dejado en pobladores de la región. Por suerte, las cinco personas afectadas ya fueron dadas de alta, ya que el daño que provocan las aguas es “sólo” a las mucosas… y si alguien se echa un buche puede tener problemas en el sistema digestivo… como náuseas, diarreas… aunque también podría haber daños al hígado y riñones… pero nada más.
Por su parte, Guillermo Haro, encargado de la Procuraduría de Protección al Ambiente (Profepa) señaló que de las “medidas urgentes” que se le han hecho a la minera -para medio solucionar el problema- ésta sólo ha cumplido con una. Todavía hace un par de días se detectaron desechos en las orillas de los ríos, además de que las contenciones provisionales ya tienen fisuras que pueden ocasionar más derrames…