Este fin de semana se armó el “reventón” en el Gran Premio de la Gran Bretaña y no en tono de fiesta, sino que cinco pilotos tuvieron un problema con su goma trasera izquiera, que los hizo poner en riesgo su vida y la de los demás.
En orden de aparición el primero en verse afectado fue Lewis Hamilton, el favorito de la gente. Corría la vuelta ocho, apenas las llantas comienzan a adecuarse al asfalto y sin deberla ni temerla su neumático explotó. Sin embargo logró sacar dividendos aunque no se mostró contento por los problemas presentados:
El problema de los neumáticos fue una pena y, a partir de entonces, sólo podía pensar en dar todo por mi parte y luchar hasta lo imposible. Tuve algunos buenos adelantamientos y, quizás con otra vuelta, podría haber alcanzado a Fernando que terminó en el podio.
Es raro que alguien que no estuvo inmiscuido directamente en el problema, se atreva a opinar pero Esteban Gutiérrez, el recién de desempacado de la GP2, comentó que esto puede afectar tanto a la integridad de los compañeros como al accionar de cada carrera:
Esto es algo que debe ser revisado por motivos de seguridad y también para evitar que una carrera esté definida por los neumáticos. El coche todavía resultaba complicado de pilotar en las curvas lentas, pero en general estuvo bien.
Felipe Massa otro de los implicados achacó el problema a la seguridad y dice que no es posible que en lugar de preocuparse por hacer un buen papel en la carrera, las llantas sean el punto de atención.
Ahora nuestra mayor preocupación gira en torno a la seguridad, porque aunque no pueda ni siquiera decir lo que ha pasado hoy, es inaceptable tener que salir a la pista sabiendo que no estás seguro.
El último de los caídos en la carrera, Sergio Pérez se mostró desmotivado porque sabe que los resultados en su equipo son primordiales y no se han dado de la mejor manera. De igual manera que sus compañeros, Checo habló de su seguridad en torno a las carreras:
Es una pena para el equipo, necesitábamos un buen resultado. Mi carrera había ido bien. Estuve entre los diez primeros la mayor parte de la tarde cuando de repente mi rueda trasera izquierda explotó.
Solo sentí la explosión en la recta del Hangar y no hubo nada que pudiese hacer. Esto es inaceptable. Estamos arriesgando nuestras vidas y no deberíamos esperar hasta que algo grave le sucede a alguno de nosotros.
