No sólo los líderes mundiales han sido víctimas del espionaje ejercido por el gobierno estadounidense; ahora sus ciudadanos también exigen el cese a la intervención de sus comunicaciones.
En una manifestación en la que el personaje principal fue Edward Snowden, miles de personas acudieron a las afueras del Capitolio con una sola consigna: “Dejen de vigilarnos”.
En el evento realizado en Washington, se protestó contra los actos de espionaje que ha realizado la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), los cuales incluyen el monitoreo a las comunicaciones electrónicas de millones de personas en los Estados Unidos.
Durante la protesta Jesselyn Radack, encargada del área de seguridad nacional en el Government Accountability Project -una de las agrupaciones que organizó el acto- dio lectura a un mensaje escrito por Snowden: “En los últimos cuatro meses hemos aprendido mucho sobre nuestro gobierno. Hemos aprendido que la comunidad de inteligencia de Estados Unidos construyó secretamente un sistema de vigilancia penetrante. Hoy día de ningún teléfono en el país se puede hacer una llamada sin dejar registro en la NSA. Hoy día ninguna transacción por Internet entra o sale sin pasar por las manos de la NSA. Nuestros representantes en el Congreso dicen que esto no es vigilancia. Están equivocados”.
La manifestación que contó la pronunciación des discursos y actos musicales –como el de la banda Yacht, quien interpretó Party at the NSA-, fue lograda gracias a la participación de cerca de 100 organizaciones tanto empresariales como en pro de las libertades civiles e incluso algunas con tintes conservadores como el Partido Libertario, “tal vez la colección más diversa de organizaciones en la historia moderna de la política estadunidense”, señaló The Atlantic.
En otra carta dirigida a los legisladores se exigió “frenar la vigilancia y rendir cuentas sobre los programas de recaudación de datos por el NSA y el FBI”. Sólo falta que les hagan caso.
