Alto fue el precio que pagaron los niños del Estado de México para obtener el derecho a la educación este año, ya que por mandato de las autoridades, antes de arrancar el ciclo escolar -el pasado lunes 18- se les hizo lectura de un “mensaje institucional” en el que se señala que los tíos Enrique Peña Nieto y Eruviel Ávila fueron responsables de tanta dádiva.
Como obviamente a los niños les vale gorro ese tipo de asuntos, los padres de familia también estuvieron presentes en la lectura de tan meloso y alienante recadito, esto pese a que el artículo 134 constitucional prohíbe que los mensajes gubernamentales emitidos “bajo cualquier modalidad de comunicación social”, incluyan “nombres, imágenes, voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor público”.
Una vez leído el mensaje la pérdida de neuronas fue tal que los pobres niños ya ni sabían para qué estaban en la escuela… y cómo no, si se les obligó a chutarse frases tan contradictorias como “el gobernador Eruviel Ávila es producto de la educación” y “contamos con el respaldo de nuestro paisano, el presidente Enrique Peña Nieto, otro mexiquense comprometido con la educación”… todo gracias a que Guillermo de León López, el lambiscón secretario particular de Simón Villar, titular de los Servicios Educativos Integrados al Estado de México, envió un oficio para ordenar cómo debía comenzarse el año escolar:
“El programa de inauguración que deberá implementarse en los niveles de preescolar y primaria, así como el mensaje que envía el doctor Eruviel Ávila Villegas, gobernador Constitucional del Estado de México, que dará el director de cada uno de los planteles”, reza el oficio 0809/2014.
Además del inicio de clases, otra gracia que se le atribuye directamente al presidente es la distribución de las 317 mil tablets para niños y maestros del quinto grado de primaria de escuelas públicas, además de la entrega de 3.2 millones de útiles escolares.
Lo que no se les dice a los niños y padres de familia es que -según el artículo 223, fracción II del Código Penal Federal- lo que hace Eruviel y EPN es delito, ya que “el servidor público que indebidamente utilice fondos públicos (…) con el objeto de promover la imagen política o social de su persona, la de su superior jerárquico o la de un tercero” incurre en peculado… por lo que deberían de ser castigados con penas de tres meses hasta dos años de prisión y multa de 30 a 300 salarios mínimos… y obviamente ser destituidos o inhabilitados para desempeñar otro cargo público.
Excelente oportunidad para enseñarle a los niños que nunca deben pasarse por el “arco del triunfo” la ley.
*Vía Animal Político