Para Presidencia, los consejos para no votar por candidatos “populistas” emitidos por empresarios no son más que… pues quién sabe qué sean. Pero de ninguna forma son intentos de coaccionar el voto o inducirlo. Cómo va a ser eso… si la ley electoral lo prohíbe.
Ahhh pues si…
Cuestionado sobre las cartas y mensajes que varios empresarios han enviado a sus empleados (pero pa’ que todo mundo las sepa) para pedirles que votan libremente… pero tomando en consideración que nos irá del cocol si gana la presidencia una opción “populista”, el vocero del gobierno federal, Eduardo Sánchez, señaló que… pues “el voto es libre y secreto”.
Este, sí, ¿pero entonces qué son los dichos de los empresarios? “Nadie, bajo ninguna circunstancia, puede coaccionarlo (el voto) ni mucho menos inducir o no inducir absolutamente nada que afecte la libertad de un votante cuando va a ejercer este derecho soberano”, agregó el buen Eduardo Sánchez.
Bueno, ya que el representante de Presidencia como que no aclaró mucho la cuestión, aunque sí nos recordó que el voto es un derecho “que todas las autoridades tienen la obligación de vigilar, principalmente las que tienen que ver con materia electoral… pues ¿Qué dicen las autoridades electorales?
Entrevistado por La Jornada, el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, se pronunció casi igual que hace unos días, al señalar que “se vale que los empresarios tengan un posicionamiento electoral”. Claro, porque estamos en una democracia. “Lo que no se vale es cruzar la frontera de la legalidad. Si se coacciona el voto es un delito”.
¿Y los empresarios no han cruzado esa línea? “Mientras sean pronunciamientos públicos, se vale, pero la frontera con la coacción es delicada”, señaló Córdova, agregando que esa frontera se cruzaría en caso de que el empleador condicione a sus trabajadores participar en las elecciones en determinado sentido. “Ese es un delito”.
Agregando un poquito más que el de Presidencia, Córdova señaló que una buena herramienta para evitar la coacción es la “dignidad del votante”. Que sepa que es libre de votar por quien quiera… Ok. Pero si tu empleador te dice que – como en el caso de Larrea – ya está guardando la billetera y que un candidato amenaza sus negocios… y por lo tanto los trabajos que ofrece, ¿no es inducir el voto?
Parece que no y lo que preocupa más son los actos de corrupción dentro del proceso electoral: “Si piensas en los dos pilares de un sistema democrático: uno es el electoral y otro combatir la corrupción. Durante décadas nos hemos ocupado sólo de una de las partes, y pedimos a esta pata que se haga cargo de la otra. (…) La compra y coacción del voto es eso, pero si es muy importante para señalar que en el otro tema no hemos hecho adecuadamente la tarea”.
