En menos de un mes, Emilio Lozoya pasó de comer pato pekinés en un restaurante de Lomas de Chapultepec a un menú bien distinto a lo acostumbrado por el exdirector de Pemex en el Reclusorio Norte.
La verdad es que el menú no tiene nada de raro o malo, pero recordando las fotos de octubre de este 2021 de Lozoya echándose un pato pekinés —o pato a la pekín—, cuyo costo supera poquito más de los mil pesos, pues sí fue un cambio radical a la dieta a la que se acostumbró el excompa de Enrique Peña Nieto.
¿Qué comió?
Campechano. Hubo opciones o al menos eso es lo que se sabe por la información filtrada por fuentes. Una versión —de una fuente de la Subsecretaría del Sistema Penitenciario— dice que a Lozoya le ofrecieron unos nopales asados con queso y un té de manzanilla.
Se sabe que durante la audiencia, el exdirector de Pemex sólo había comido unas nueces y frutas deshidratadas que llevaba su mamá. Esa es la versión de Emeequis.
Sin Embargo dice que fue un sándwich de jamón con queso y a la mañana siguiente el desayuno de campeones: huevo con jamón y atole.
El cambio es drástico, luego de ver que —en el restaurante de Lomas de Chapultepec— Lozoya pagó poco más de mil pesos por un pato pekinés y entre 750 y dos mil pesos por una botella de vino.
Emilio Lozoya en el Reclusorio Norte
Desde que Emilio Lozoya no salió de los juzgados del reclu Norte, medios se movieron para saber cómo iba a estar el menú que casi casi es símbolo de la ironía de este caso.
¿Por? El caso de Lozoya llevaba un buen rato sin avanzar, después del trancazo de sus declaraciones sobre los supuestos moches que el gobierno de EPN repartió —con dinero de la empresa brasileña Odebrecht— a legisladores como Ricardo Anaya para que dieran luz verde a la Reforma Energética.
Salió un video de colaboradores de la bancada del PAN —durante el gobierno de Peña— embolsándose unos billetes, pero la FGR dejó en libertad a Lozoya con la promesa de que habría una colaboración para resolver este caso.
Hasta que… las fotos de Emilio Lozoya comiendo en el restaurante carísimo de París le dieron en la torre, la FGR se movió más rápido y en una audiencia para ver si le daban chance al exdirector de Pemex para recabar pruebas a su favor —era la sexta vez que lo pedía—, la Fiscalía General de la República pidió prisión preventiva por riesgo de fuga.
Y sí, después de unas fotos que evidenciaron cómo la estaba pasando el buen Lozoya.
Sin restaurantes: Emilio Lozoya se queda en prisión preventiva