Justo después de que el juez otorgara otra prórroga a Emilio Lozoya para seguir rascándole a su memoria y presentar pruebas a su favor, resulta que se va a quedar en prisión preventiva debido al riesgo de fuga que existe.
Lozoya, por su parte, se declaró inocente y explicó que su defensa estaba intentando llegar a un acuerdo para la reparación del daño a pesar de que no tiene vela en el asunto.
De acuerdo con el juez del caso, efectivamente hay un riesgo de fuga y como no ha alcanzado un acuerdo para aplicar a un criterio de oportunidad, es prudente que se quede tras las rejas en lo que se resuelve el proceso.
Al terminar el proceso, elementos de la Guardia Nacional lo detuvieron para ingresarlo al Reclusorio Norte pero con medidas de protección porque en el mismo penal hay personas denunciadas por él.
La audiencia contra Emilio Lozoya
Muy trajeadito, con portafolio y cubrebocas el exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, llegó tempranito al Reclusorio Norte para pedir ante un juez de control que le diera 60 días más de chance para presentar pruebas a su favor antes del cierre de la investigación complementaria en su caso.
Esta es la sexta vez que pide tiempo y la FGR protestó. Afirmó que ya no le van a dar el famoso criterio de oportunidad porque nomás se está haciendo pato, que está obstaculizando el proceso y que lo van a acusar de cohecho, lavado de dinero y asociación delictiva por la trama Odebrecht.
Después de que el juez autorizara el último chance, pero de 30 días, se discutieron las medidas cauterales que aplicarán a partir de ahora y hasta el cierre de la investigación.
Tanto la FGR, como el abogado de Pemex y el representante de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda pidieron al juez que se aplicara prisión preventiva para Lozoya por riesgo de fuga.
La FGR acusó que Lozoya cuenta con 2 millones de euros en una cuenta de una empresa offshore relacionada con Odebrecht, dineros que no reportó y con los que podría darse a la fuga. Eso además de contar con una red de protección, cosa que se demuestra con el tour restaurantero que se aventó en la Ciudad de México.
*Con información de Animal Político
