A ojo de buen cubero parece que el caso de Emilio Lozoya nada más no avanza. Y en estos últimos días de noviembre de 2023 nos enteramos que una jueza bateó a la FGR en su objetivo por quedarse con una casa de 38 millones de pesos —propiedad del exdirector de Pemex.
Sí, así como lo leen. De acuerdo con una sentencia pública del 10 de noviembre, Emilio Lozoya está por recuperar una casa, ubicada en el poniente de CDMX, valuada en 38 millones de pesos.
Y que la FGR (Fiscalía General de la República) pretendía que pasara a manos del Estado —después de asegurarla en 2019 por si las flais.
¿Cómo está eso de que Emilio Lozoya le ganó a la FGR y le regresarán su casa de 38 mdp?
Lo que sabemos es que una jueza Federal —del Juzgado Segundo de Distrito en Materia de Extinción de Dominio con Competencia en la República Mexicana y Especializado en Juicios Orales Mercantiles en el Primer Circuito— declaró improcedente un recurso legal que la FGR presentó para quitarle la casa de 38 mdp a Lozoya.
Eso quiere decir que: la casa se quedará en manos de Emilio Lozoya —quien, dicho sea de paso, está en el Reclusorio Norte. Hasta allá llegó por los casos de Agronitrogenados, ya suspendido, y Odebrecht.
¿Por qué la jueza decidió eso? Según esto, la FGR presentó un recurso legal que no estaba vigente cuando ocurrió el presunto delito de lavado de dinero.
Va de nuevo: la FGR alegó que la casa fue comprada por Emilio Lozoya con lana que recibió de sobornos.
El dinero en cuestión supuestamente fue por arreglar la compra de la polémica e inservible planta de Agronitrogenados —compra-venta que fue un escandalazo de aquellos.
Y ahí tienen: con una investigación por lavado de dinero en el caso de Agronitrogenados, la FGR planteó quedarse con la casa de 38 mdp mediante el recurso de extinción de dominio.
La extinción de dominio no es otra cosa sino una figura jurídica que permite al Estado quedarse con los bienes o el patrimonio cuya procedencia no es legal.
Y desde 2019 la extinción de dominio ya tomaba como causal o podía proceder en casos de operaciones con recursos de procedencia ilícita.
¿Cuál fue el problema con Emilio Lozoya?
La bronca es que, de acuerdo con la jueza, la casa fue comprada en 2012. Pero como en ese año aún no aplicaba la extinción de dominio por lavado de dinero, este recurso no podía aplicar al caso de Emilio Lozoya.
Con esta decisión ya son dos sentencias en contra de la FGR. La primera fue cuando en septiembre de 2019 un juez suspendió el proceso penal contra Lozoya por el caso de Agronitrogenados, ya que los daños se estaban reparando con un dinero que pasó Altos Hornos de México —la empresa que le vendió a Pemex la planta chatarra.
Ahora, esta es la segunda orden que le batean a la FGR, institución que podrá apelar la decisión de la jueza e irse de largo.
Mientras, Emilio Lozoya sigue sin disfrutar de su pato pekinés en el reclusorio, a la espera de la conclusión de otro caso que tiene pendiente: el de Odebrech iniciado también por sobornos.
