¿No era al revés? Esta mañana, desde Moscú, oficiales del Kremlin acusaron a Estados Unidos de intentar interferir en sus próximas elecciones. Para acabar de confundir a toda la comunidad internacional, estas acusaciones aparecieron tras un anuncio del Departamento de Tesoro estadounidense en el que decidieron aumentar las sanciones contra Rusia por interferir en los comicios americanos de 2016.
—¡Tú te metiste en mi elección! —¡Tú te metiste en mi elección! —¡NO!¡Tú….!
Dimitry Peskov, vocero del Kremlin se refirió a las recientes acciones del gobierno estadounidense como “un intento obvio y directo de influenciar nuestras elecciones”. Estas acciones, incluyen un reporte completo de empresarios y millonarios rusos y las conexiones posibles con el actual presidente, Vladimir Putin.
Rusia tendrá elecciones el 18 de marzo de este año y Putin es considerado un claro favorito. Sin embargo, las votaciones presidenciales rusas han estado en la mira pública tras el arresto del candidato de oposición, Alexei Navalny.
Además de quejarse de los intentos norteamericanos de involucrarse en las elecciones rusas, Peskov —el vocero del Kremlin—, aprovechó la oportunidad para hablar —demasiado— bien de su jefe y dejar más clara la posición del presidente ruso frente a las futuras elecciones.
“La popularidad de Putin llega mucho más lejos que las fronteras rusas. No creo que nadie dude de su capacidad de liderazgo y que sea considerado un líder absoluto en el Olimpo político. Es improbable que exista en estos momentos competencia seria en las elecciones.”, dijo Peskov en una declaración tomada por CNN.
