Aunque las autoridades electorales ya dieron un fallo (¿definitivo?) y Rafael Moreno Valle está ansioso por regresar al palacio de gobierno de Puebla (como “primer caballero” de la gobernadora electa, Martha Érika Alonso), un estudio realizado por un académico de la Ibero indica que todavía no se puede cantar victoria. No se debería, mejor dicho, ante tamañas irregularidades que ha detectado.
Según lo explicado por Miguel Santiago Reyes, quien encabezó el estudio con el más que sugerente título de “Inconsistencias graves en la elección de gobernador en Puebla”, en los comicios con los que se decidió que la gubernatura poblana quedará en manos de Martha Érika Alonso se detectaron irregularidades que deberían hacer recular a las autoridades electorales. Por ejemplo, el hecho de que no hubo una lista nominal definitiva… bastante necesaria, ya que entre los datos que manejó el INE y el Instituto Estatal Electoral de Puebla (IEEP) hubo una diferencia de casi 11 mil personas.
Además, Santiago Reyes destacó la falta de coincidencia de la votación entre la elección presidencial y la de gobernador, situación que se presentó en 73.9% de las casillas analizadas, las cuales representan el 12.1% del universo de la elección. El académico asegura que, de corregirse los errores, Martha Érika Alonso perdería 1.1% mientras que Miguel Ángel Barbosa ganaría 3%… porcentajes que moverían dramáticamente la elección, ya que la panista supuestamente ganó con el 38.05% de la votación, mientras que el de Morena se quedó con 33.93%.
De la muestra utilizada para el estudio, en 9 de cada 10 casillas el investigador halló errores… los cuales, como característica principal, mostraron tendencia favorecedora a la panista Martha Érika Alonso. Según el académico, las inconsistencias detectadas apuntan a que en la elección de gobernador en Puebla hubo un fraude cuya responsabilidad recaería en el IEEP. “El instituto electoral es responsable de esta situación porque ellos no corrigieron los errores (…) pusieron cifras completamente distintas a lo que estaba en el acta. Los responsables no pueden ser los ciudadanos porque ellos estuvieron en las casillas y no fue en la casilla donde se hizo esta operación (irregularidades) fue en los sistemas de cómputo”.
En el 70% del país hubo voto diferenciado. Incluso donde ganó @lopezobrador_ los candidatos de #Morena obtuvieron menor % de votación. Ni es estudio de la Ibero, ni hubo fraude. Sólo el intento de @MBarbosaMx de pasar por encima de la voluntad ciudadana. @Fer_Manzanilla https://t.co/6Q246Non52
— Max Cortázar (@maxcortazarl) 18 de septiembre de 2018
Respecto a este estudio el vocero del equipo de transición de la gobernadora electa, Max Cortázar, hizo lo que se podía esperar: desmentirlo y desestimarlo: “Ni es estudio de la Ibero, ni hubo fraude”, aseguró el panista, para después recordar que en 70% del país hubo voto diferenciado: “incluso donde ganó AMLO, los candidatos de Morena obtuvieron menor votación”… claro, por eso el partido fundado por López Obrador no se llevaron camión entero en Senado y Cámara de Diputados… ¡un momento!