El líder del sindicato de Pemex, Carlos Romero Deschamps, y su familia están llenos de lujos excesivos, vuelos en jets privados con todo y perros, ferraris y propiedades en Estados Unidos. No es por cualquier cosa, la mafia, perdón, el sindicato se ha dedicado a desangrar a la paraestatal favorita de todos los mexicanos: Pemex (cuyas deudas tendremos que pagar gracias a la Reforma Energética y la corrupción interna).
Pero el sindicato no solo le ha robado a los ciudadanos mexicanos, también a su propio abogado (dicen que si duermes con escuincles amaneces todo miado), Carlos Ryerson. El abogado declaró en una corte de Texas que los dirigentes del sindicato le transaron 2.5 millones de dólares.
De un cheque de 3.5 millones de dólares que el sindicato le iba a dar por sus honorarios, solo recibió un millón (es decir, firmaron un cheque más grande para justificar… bueno, la ausencia de los otros dos millones de dólares).
Todo ocurrió en frente de Romero Deschamps, quien, según el abogado, se la pasaba contando pilas y pilas de billetes.
Recordemos que esa corte texana determinó que el sindicato petrolero es culpable del fraude cometido con el incumplimiento de un contrato celebrado desde 1984 con la empresa petrolera Arriba Limited, pues no entregaron 6 millones de barriles de crudo que ya habían pactado.
El juicio ha puesto en peligro las propiedades de Deschamps en el gabacho y hasta en ¡Dubai! donde, al parecer, también tienen propiedades.
Pero Deschamps no está triste, todos sabemos que la Reforma Energética tiene bastante consentido a su querido sindicato (al rato recuperará lo perdido).
****Vía Reforma