¿Pensabas que hoy era un día cualquiera y que no se celebraba nada?
Pues no, este día el semáforo cumple 100 años. Amado por pocos, odiado por muchos, pero necesario para nuestra coexistencia en las calles, este dispositivo electrónico alcanza su primer siglo de vida.
Por increíble que parezca, el concepto en el que está basado el semáforo es más antiguo que los propios automóviles. Por ejemplo, en el Londres de 1868, por la noche se usaban candiles con luces verdes y rojas, que eran controlados por un policía para regular el flujo de los transeúntes. El primer semáforo, como tal, surgió 46 años después en Cleveland, Estados Unidos.
Su invención es atribuida a varias personas, entre las que se encuentra Lester Wire, policía de Salt Lake City; o Garrent Morgan, hijo de un esclavo; por cierto, Garrent también creo el suavizante para pelo y la máscara de gas.
Volviendo al tema de esta nota, en 1908 Henry Ford creó el modelo T, y en 1913 los semáforos comenzaron a producirse en masa.
En el presente los semáforos dominan al mundo. Imagínense, según Siemens (uno de los fabricantes) tan sólo en Alemania hay 1.5 de millones de semáforos. Si algún conductor o peatón valiente tuviera que pasar por donde estos se encuentren alineados y estuvieran rojo, el tiempo de espera sería de aproximadamente tres años.
Para el ingeniero Wilke Reints, de Simens, el semáforo y su temporización…
“Es todo un arte. Hay algoritmos fascinantes para regular el tráfico. Y se puede influir muchísimo, aunque no siempre guste a los conductores. Hay zonas que permiten un tráfico fluido, mientras que en otras se interrumpe a propósito, con el fin de que los viajeros opten por el bus o el tren”.
A cien años de su aparición, el concepto y funcionalidad del semáforo no ha cambiado mucho, y de hecho, no se espera que haya muchas diferencias: El rojo seguirá marcando alto, el amarillo es preventivo y el verde nos permite avanzar.
El significado de estos colores ahora es usado en otros aspectos de la vida, como para señalar el valor nutritivo de los alimentos.
Como dato vacilador, en China quisieron invertir el sentido del verde y el rojo (por aquello de que el rojo es el color del Partido Comunista), pero todo resultó en caos.
Feliz cumpleaños semáforo, aunque a veces te mentemos la madre y te odiemos.
