Esta semana el príncipe Harry se hizo una prueba de VIH en directo para animar a la gente a hacerse la misma prueba. El príncipe de 31 años de edad se sometió a la prueba del virus de la inmunodeficiencia humana en el hospital de St. Thomas en el centro de Londres y compartió el proceso a través de la página de Facebook de la familia real.
Solo unos minutos después, el hermano del duque de Cambridge recibió su resultado: negativo. El príncipe Harry participó como voluntario para ayudar a desestigmatizar el VIH y demostrar lo rápido que es el proceso para saber si se está contagiado o no.
“Si eres hombre, mujer, gay, hetero, o incluso pelirrojo, ¿por qué no te haces la prueba? Incluso la gente que no está en situación de riesgo debería de someterse a este test”, y añadió que “Para normalizar esta situación lo mejor es que todo el mundo se haga esta fácil prueba“, finalizó Enrique de Gales.
El director de la fundación Terence Higging Trust, Ian Green, resaltó que con este acto el príncipe Harry “no solo demuestra su personalidad y su compromiso para atacar el virus del VIH, sino que además está logrando que el mensaje a millones de personas alrededor del mundo y recordó que “la prueba del VIH es fácil, rápida y no hay nada que temer”.
La próxima semana el príncipe Harry viajará a Sudáfrica para ser parte de la Conferencia Mundial del VIH y el SIDA en Durban. Harry aseguró que sigue los pasos de su madre, la princesa Diana de Gales, quien a finales de 1980, cuando muchos creían que la enfermedad se podía contagiar través del contacto casual, se sentó en la cam de un hombre enfermo de sida y sostuvo su mano en la primera de muchas sesiones fotográficas para demostrar lo contrario.
