En el video que verán a continuación un niño logra hacer lo que nadie en este planeta se plantea hacer a los siete años.
Su nombre es Giuliano Stroe y su papá lo ha puesto a practicar por más de cinco años, o sea que si las cuentas salen bien, y si el supuesto padre no miente; este niño apenas dejó el pañal y comenzó a ensayar ¡a los dos años!
Su rutina inicia al apoyarse en cuatro botellas, una vez bien sujeto, comienza a hacer lagartijas, hasta alcanzar las 12 flexiones.
Para después recibir aplausos y presumir su six-pack.
Y por su puesto su talento no ha pasado desapercibido, ya se encuentra en el libro de los Récord Guiness como el niño más fuerte del mundo. Y todo gracias al papá.