Muchos aficionados a los Delfines de Miami se han de preguntar por qué el equipo no funciona, no se mete en la postemporada, no tiene buenos jugadores y principalmente, por qué no gana partidos. Pues un diario de la ciudad de Miami parece haber encontrado la respuesta.
Los Delfines son de esos equipos que tienen mucho jale en nuestro país. Todavía recuerdo los tiempos del gran Dan Marino, pero desde que él se retiró, no han tenido una figura de ese peso e importancia. En nuestro país, los Delfines son unos de los consentidos y los seguidores siempre están esperando que la temporada termine con un balance positivo y así, meterse a los playoffs.
Algunos han culpado a los dueños por no darle más importancia al equipo; otros a las malas decisiones en el Draft y por supuesto, no podían faltar las culpas a los jugadores; sin embargo, las malas temporadas de los Delfines podrían tener ya una respuesta.
De acuerdo con el Miami News, hay una teoría que explicaría las malas temporadas del equipo. Como saben, hoy en día juegan en el Estadio Sun Life, anteriormente Estadio Land Shark, anteriormente Estadio Delfín, anteriormente Estadio Pro Player, anteriormente Estadio Joe Robbie y anteriormente, donde los nativos Tequesta tenían su cementerio, antes de que el primer estadio se construyera en 1985. Un momento… ¡¿qué?!
Primer vestigio: este artículo publicado en 1985 en el Ocala Star
Antes de la llegada de los españoles en el siglo XVI, los Tequesta habitaron la Bahía Vizcaína y el condado Broward. Durante la colonización de los británicos, fueron reubicados y dejaron atrás muchas cosas, incluyendo un lugar que, de acuerdo con los arqueólogos, era un cementerio y que allá por el año 88 d.C. les pertenecía y 1000 años más tarde, a la Tribu de los Seminoles.
Volviendo al mundo moderno y de la NFL, los Delfines de Miami tuvieron permiso para excavar en este terreno, siempre y cuando los arqueólogos estuvieran presentes para examinar el suelo. Excavaron en incrementos de seis pulgadas, lo que le permitió a los expertos tamizar a través de la tierra y una vez que el área fue despejada de artefactos y restos antiguos, el equipo era libre para seguir construyendo su estadio.
(Suena a un caso que Scooby-Doo y sus amigos acudirían)
Ahora, lo curioso es que cuatro meses antes de esta obra, los Delfines asistieron al Super Bowl y desde entonces no han vuelto.
¿Creen que les haya caído una maldición? Les repetimos, esto es una teoría que sólo los jugadores pueden revertir.