Luego de recorrer casi 194 kilómetros que separan a Iguala, Guerrero del Zócalo de la Ciudad de México, ayer por la tarde hizo su arribo la caravana 43×43, la cual es una más de las manifestaciones que se hacen para exigir justicia a las autoridades federales por la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Ya en la plancha del Zócalo, Carlos Ventura, uno de los convocantes señaló los objetivos de la caravana:
‘‘Exigir la presencia con vida de los normalistas, que se investigue de quiénes son los cadáveres encontrados en las fosas clandestinas de Guerrero –también son seres humanos y hay que pelear por ellos– y enfatizar que el caso Iguala es la gota que derramó el vaso, porque en todo el país sucede lo mismo; ya estamos hartos’’.
Por su parte, el vocero de 43×43, José Alcaraz, hizo referencia a lo ocurrido en una noche anterior en el mismo lugar en el que la caravana dio fin a su largo peregrinaje, señalando que la quema de la puerta de Palacio Nacional es sólo una muestra más del descontento de la gente ante la inoperancia de las autoridades: ‘‘el Estado no es ya el que la sociedad necesita, hay que reformarlo radicalmente’’; sin embargo, para conseguir ese objetivo ‘‘La lucha debe ser pacífica, aunque el Estado ha provocado que muchos sectores recurran a la violencia como método de protesta’’, enfatizó Alcaraz.
Antes de su llegada al Zócalo de la Ciudad de México, la caravana realizó un recorrido desde el centro de Tlalpan, en el que pasando por diferentes localidades en las que recogieron expresiones de diferentes personas, algunas de ellas se sumaron al contingente.
Así como la marcha celebrada el sábado, la cual salió de las instalaciones de la Procuraduría General de la República (PGR) con dirección al Zócalo, en la caravana 43×43 se hizo presente la ahora lamentable frase #YaMeCansé, con la que se exigió la renuncia del titular de la PGR, Jesús Murillo Karam, quien el viernes pasado emitió la triste declaración con la que seguramente será recordado al terminó de su gestión. Durante la marcha del contingente, también se solicitó la dimisión del presidente Enrique Peña Nieto.
Respecto a lo declarado por Murillo Karam el viernes pasado –relativo a los normalistas, no a su cansancio– el vocero de 43×43 rechazó la hipótesis con la que se conduce la investigación, señaló que insinuar que los jóvenes estudiantes hayan sido asesinados e incinerados es un “argumento ofensivo, humillante. Así nada más, sin ninguna prueba. No, no lo vamos a aceptar’’.