En encuentro disputado en la Ciudad de Cuernavaca, el edil Cuauhtémoc Blanco, hizo valer su condición de local, imponiéndose al corresponsal de Reforma, Héctor Raúl González, quien regresó a casa con su simple pregunta en ceros:
“¿Por qué poner a un médico en la dirección de Barrancas del Ayuntamiento, cuando debe ser un biólogo?”
Ya que en cotejos anteriores no ha salido bien librado, “El Cuau” ya tiene su estrategia bien diseñada: evitar las sesiones de preguntas y respuestas. Sin embargo, los embates de la prensa continúan en las llamadas “entrevistas banqueteras” y es ahí donde Blanco sacó la casta… bueno, más bien su falta de astucia política.
“Ya te dije que a ti no te voy a dar entrevista”.
Protegido con una defensa conformada por miembros de la Policía Federal, el ex futbolista intentó eludir a la prensa saliendo por la puerta trasera del inmueble en el que, previamente, tomó protesta a los comités de planeación municipal. No obstante, los reporteros ya se la saben y lograron llegar hasta la meta… aunque sin muy buenos resultados:
“A mí no me dijiste nada”, respondió el reportero ante la negativa de Blanco. “Desde la otra vez te dije y no te voy a dar entrevista (…) “A ver, yo te voy a decir una cosa, ¿no es forzoso que le dé entrevista, o sí?
La selectividad de los medios con los que a partir de ahora tendrá trato “El Cuau” quedó más que evidenciada. Después de rechazar las preguntas de González, otro grupo de periodistas se acercó al edil: “A ustedes sí les doy entrevista”.
Quizás pensó que le iban a preguntar sobre su partido de despedida o sobre el descenso de Dorados… pero, para su pesar gastrointestinal, los de la prensa cuestionaron la denuncia por fraude fiscal que sobre su joroba él pesa.
“Ayer ya lo expliqué, no hay ningún fraude, son cuestiones políticas. Cómo me gustaría que estuviera aquí el tesorero para que les explicara. Aquí no hay ningún fraude. Si ustedes quieren manejarlo así, manéjenlo así”.
Retando a los reporteros a comprobar cuestiones legales, Blanco se limitó a señalar que está “feliz con lo que está haciendo” … y mientras la gente de Cuernavaca esté igual de contenta, pues que los medios digan lo que quieran.