Indudablemente la actual visita del Papa Franciso ha causado mucha controversia, las opiniones se han divido en dos: quienes aplauden su visita y quienes de plano ni se lo quieren encontrar en su camino -literalmente-. En sí no tenemos nada en contra de su visita, al contrario, es tan importante su papel como representante de masas, que a decir verdad sus declaraciones pueden tener mucho peso tanto nacional como internacionalmente, lo cual es excelente momento para que alguien nos ayude tantito en destapar las cloacas de México, ¿no?; pero bueno, al parecer tampoco vino con esas intenciones. El caso es que como jefe de estado de la Ciudad del Vaticano, tiene todo el derecho de visitar nuestro país, pero así como lo tiene, también debe respetar el de los demás, y más teniendo en cuenta que México es un estado laico -o al menos eso dice nuestra constitución-.
Pero a decir verdad cuestionamos si realmente se está respetando los artículos de nuestra constitución referentes a la religión. Muchos saltamos cuando descubrimos la innumerable cantidad de propaganda que el mismo gobierno de la CDMX pagó para recibir al Papa, que si bien se pueden justificar como ‘propaganda turística’ no quita que hace alusión directamente a la religión católica.
Pero bueno… recordemos nuestras viejas clases de educación cívica, donde nos hacían memorizar los principales artículos de nuestra constitución, y que al parecer hacemos total caso omiso -hasta los mismos gobernantes-. En el artículo 3, el cual hace referencia a que todos tenemos derecho a recibir una educación básica, gratuita y laica, textualmente señala:
Garantizada por el artículo 24 ‘La libertad de creencias’. Dicha educación debe ser laica, por tanto, se mantendrá por completo ajena a cualquier doctrina religiosa.
Ok, ok… entonces, de ser así, por qué aparece esto:
Y no se trata de publicidad como la que hizo el gobierno de la CDMX respecto a la visita, es tal cual un banner oficial de la Secretaria de Educación Pública, donde a la izquierda aparece la catedral de México y del lado derecho el cotorro Papa Bergoglio. ¿Y para qué? pues no’mas, para santificar la página web.
Aclaramos, no tenemos nada en contra de la visita del Papa, pero este tipo de actos son tanto una falta a nuestra constitución política, así como una falta de respeto a todas las personas que ejercen otra religión o que simplemente no practican ninguna. Sabemos que la religión dominante en México es la católica, pero también… ya estamos en el siglo XXI e indudablemente la diversidad cada vez es mucho mayor; y por que todos vivimos en un mismo lugar, todos debemos respetarnos mútuamente.
Pero bueno, vivimos en México, el país donde se suspenden las clases por la visita del Papa -las cuales afortunadamente la SEP declaró que deben obligadamente reponerse de inmediato-. O ¿se acuerdan de aquel 2013 cuando Margarita Arellanes, la alcaldesa de Monterrey, Nuevo León, entregó las llaves de la ciudad a Jesucristo?, lo mismo que hicieron otros tres presidentes municipales del norte del país (César Garza, Enrique Pelayo Torres y Rodolfo Ambriz), quienes entregaron sus municipios a Jesús para que instale ahí su “reino de paz”.