Por burlón, lo quitan del público en un discurso de Trump

Por acá se volvió famoso el “yo sé que no aplauden”, pero cruzando la frontera la cosa no está mucho mejor. Si eres uno de los afortunados de poder presenciar en carne y hueso los discursos de Donald Trump, más te vale tener tu mejor sonrisa —que no sea sarcástica, no te hagas—, un pantone clarito y que tu gorra roja esté en perfecto estado. Si no lo haces, te volverás viral y te invitarán a la salida.

Este jueves, el preciso de Estados Unidos se quería despejar de la tumultuosa vida en la Casa Blanca reuniéndose con sus seguidores más aguerridos. Entonces, organizó un rally en Billings, Montana. Una ciudad de poco más de 100 mil habitantes y más del 90% blanca; o sea, su mero mole.

Entre aplausos, gritos, MAGAs y ningunos tennis Nike, el presidente de Estados Unidos se aventó sus Greatest Hits: habló de la frontera, de cómo ganó la elección en el 2016, de la NFL y de cómo la “prensa mentirosa” se pasa de lanza con él. La cosa es que alguien del público no se veía muy animado y de ahora en adelante lo llamaremos: ‘el chavo de cuadritos‘.

En uno de los mejores momentos del speech, Donald Trump dijo que “tenían muchísimo apoyo” y el ‘chavo de cuadritos‘ respondió con un “¿neta?”

Es más, cuando la audiencia en todo Estados Unidos comenzó a notar que a este afortunado individuo nomás no le entraban las palabras del presidente, las redes sociales se inundaron con sus mejores videos. “Es difícil ganar el voto popular (…) fue como ganar una carrera de 100 metros contra una milla”, decía Trump y el ‘chavo de cuadritos’ solamente le hacía caras. 

Una sonrisa burlona por aquí, una cara de what por acá y el discurso de Trump tenía más audiencia que nunca, hasta que mágicamente el hombre de la noche desapareció:

Entonces, ¿cómo le hizo este personaje para terminar detrás de Donald Trump? Además de que probablemente le falló al equipo de comunicación oficial, usuarios de redes sociales habían encontrado algo muy popular: la página de Craigslist estaba repleta de invitaciones pagadas a ir al evento, acá les dicen acarreados.