De acuerdo con información de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos (Conaliteg) entregó hasta ahora 463 millones de pesos en 13 contratos públicos a dos empresas con accionistas que, casualmente, formaron parte de una asociación civil donde también se encontraba el director de esta dependencia: Miguel Antonio Meza Estrada.
¿Qué es lo que ocurre con estos contratos que ha entregado Conaliteg?
Según información de este medio, estos 13 contratos de la Comisión de Libros de Texto Gratuitos se han entregado por adjudicación directa a Litografía Magno Graf S.A. de C.V., así como a Grupo Bio Pappel, donde los principales accionistas formaron parte, junto con Meza Estrada, de la asociación civil Amigos de la Letra Impresa, en 2006.
No solo eso, esta organización compartió oficinas con el Instituto Ortega-Vasconcelos de México, el cual es señalado por usurpar el nombre de un instituto español y encabezado igualmente por Meza Estrada y por un fundador de Amigos de la Letra Impresa, Víctor Manuel Torres Pinda. De hecho, este último ocupa actualmente un cargo en la Comisión de Libros de Texto Gratuitos.
¿Cuál es el historial de Meza Estrada en la Comisión de Libros de Texto Gratuitos?
Miguel Antonio Meza Estrada dirige la Conaliteg desde diciembre de 2018, aunque anteriormente, de 1994 a 1999, durante el sexenio de Ernesto Zedillo, ocupó también este cargo. Mientras que en 2006, formó parte de la Asociación Civil “Amigos de la Letra Impresa”, cuya principal meta era “promover la lectura y escritura, así como fomentar y llevar a cabo intercambios académicos con profesionales de la educación”.
Por otra parte, Amigos de la Letra Impresa recibió del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), donativos por cinco millones de pesos en 2008, siete millones en 2013 y seis millones en 2015 para realizar actividades de fomento a la lectura. Asimismo, el gobierno de la Ciudad de México le dio cuatro millones en 2009.
Después, en 2011, Amigos de la Letra Impresa fundó el Centro Cultural Aliac en la calle República de El Salvador, en el Centro Histórico capitalino; aunque, en 2019 cambió de sede a la calle Allende y cerró ese mismo año.
Entre los fundadores de esta organización dirigida por Meza Estrada, de la cual MCCI logró conseguir una copia de la acta constitutiva, se encuentra Armando Prida Huerta, dueño de Litografía Magno Graf S. A. de C. V., empresa dedicada a la impresión de libros, periódicos y revistas, entre otras cosas.
Sí, de hecho esta empresa, en 2019, también recibió 12 contratos por 459 millones de pesos por adjudicación directa; lo que significa que se dieron sin un concurso o licitación de por medio. Estos contratos son por impresión de libros de texto de educación básica, libros para escuelas de tiempo completo, de telesecundaria, de educación indígena y de convivencia escolar, de acuerdo con los documentos de las adjudicaciones disponibles en la plataforma Compranet de Hacienda.
¿Por qué los contratos fueron por adjudicación directa?
Según el portal de investigaciones, la copia y detalles del contrato no se encuentran disponibles en ninguna de las 12 adjudicaciones y solamente en cinco está el documento de justificación de asignación por adjudicación directa.
Una de estas cinco justificaciones es la excepción a la licitación de cinco órdenes de libros del programa del alumno de primaria, donde los procesos de licitación LA-011L6J001-E5-2019 y LA011L6J001-E6-2019 se declararon desiertos. Sí, luego de que las empresas que participaron, como Litografía Magno Graf, presentaron precios por arriba del presupuesto de Conaliteg.
Las otras cuatro justificaciones señalan que no existió licitación para no prolongar el tiempo de distribución de los materiales y evitar que los costos incrementaran. Asimismo, el contrato más grande fue por 115 millones de pesos, el cual se otorgó en mayo de 2019 para la impresión de siete títulos de libros de texto.
Para sorpresa de muchos, esta no es la primera ocasión en que Conaliteg, encabezada por Meza Estrada, beneficia a Litografía Magno Graf. También en 2002, la Procuraduría General de la República (PGR) lo investigó a él y a Prida Huerta después de que el entonces titular de la comisión, Jorge Velasco y Félix denunció que la venta de libros de texto por parte de Litografía Magno Graf tuvo un presunto sobreprecio en 1999, por mil millones de pesos.
Finalmente, MCCI señala que antes de 2019, el año en que más contratos consiguió Litografía Magno Graf, vía adjudicación directa con la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos fue en 2017, cuando sumó 152 millones de pesos en 12 contratos. Ahora los que se le otorgaron en 2019 representan tres veces más recursos que los destinados dos años atrás.
*Con información de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad
