Esta nota es una obligada referencia a don Enrique Garay.
Aplicando el viejo truco de “mira mis calcetines”, un político sueco mostró el pipián a través de su cuenta de Instagram.
Lars Ohly –nombre del susodicho, se encontraba calentando sus carnes, cuando tuvo la magnífica idea de compartir con el mundo el tatuaje que tiene en pierna. Sin embargo, la impresión logró captar algo más que la tinta en su piel y de inmediato comenzaron las bromas hacia su salchichita coctelera.
Sin embargo el sueco no desconoció a su amiguito y contrario a lo que en su momento hizo Enrique Garay, Ohly no dijo que hackearon su cuenta y mejor tomó con humor el incidente. Simplemente comentó: ” Hay una foto en Instagram que muestra más de lo previsto. La acabo de rectificar”.
El hecho sirvió para que sus compañeros se burlaran de él y de paso meditaran su decisión de unirse a las redes sociales: “¡Felicidades por hacer pública esta exclusiva después de tantos años!”, comentó el ministro de Asuntos Exteriores, Carl Bildt, mientras que su correligionario del Partido de Izquierdas, Jonas Sjöstedt, dijo:”acabo de decidir que no voy a utilizar Instagram”.
Si tienen estómago para ver el “tatuaje” de Ohly –y no piensan comer chistorra en mucho tiempo- pueden ver la imagen aquí.
