Aunque las autoridades sanitarias de Dinamarca aún no saben lo suficiente sobre el impacto de un brote de coronavirus en las granjas de visones —¿cómo surgió?— ya ordenó el sacrificio de casi 17 millones de estos animales. ¿Por qué?
De acuerdo con la Administración de Alimentos y Veterinaria de Dinamarca, se han registrado casos de COVID-19 en las granjas de visones —afectando principalmente a estos pequeños animales— y los contagios se expandieron hasta contabilizar 76 granjas con casos de coronavirus a inicios de octubre pasado.
12 minkfarme er testet positive for #covid19dk siden i fredags. Fødevarestyrelsen er bekymret over udviklingen. Aflivning af mink med COVID-19 og raske mink i omegnen er nødvendig for at mindske risikoen for smittespredning til samfundet👉https://t.co/ivuV0XzXk6#dkpol pic.twitter.com/lZpd2HkK1j
— Fødevarestyrelsen (@Foedevare) October 12, 2020
Ante esta situación —y la propagación diaria de los casos—, la Administración de Alimentos y Veterinaria, junto con las autoridades sanitarias, dieron luz verde para que los visones sean sacrificados.
Sacrificarán a visones por casos de COVID-19 en Dinamarca
Esta “tarea” comenzó el jueves 8 de octubre en la comunidad de Gjoel, ubicada al oeste de Aalborg. Así lo dio a conocer el gobierno danés —noticia que ha causado impacto a nivel internacional, tanto que hasta fue retomada por la agencia AP.
Y es que la preocupación no es sólo para la comunidad internacional, sino también para los daneses —algunos granjeros se han negado a sacrificar a los visones, un poco por las pérdidas económicas que tendrán que enfrentar y otros más, por respeto a la especie.
Sin embargo, la Administración de Alimentos y Veterinaria ha argumentado que el sacrificio de los visones es necesario ya que son considerados como un riesgo por la propagación del COVID-19 en otras granjas —y entonces, el problema al que se enfrentarían las autoridades sanitarias sería mayor.
Sin embargo, las propias autoridades de Dinamarca han admitido que aún no saben cómo se originó el brote de coronavirus en las granjas y mucho menos si las personas pueden contagiarse vía los visones, lo único certero es que la propagación de los casos va granja por granja y este ha sido su principal argumento para sacrificar a estos animales.
De seneste dage har været præget af en del misforståelser om kompensationen til minkavlere, der har covid19-smittede besætninger. @Foedevare udlægger teksten her https://t.co/Ku7Cc72i2I #dkpol #dkmedier pic.twitter.com/65ktkopCyZ
— Miljø & Fødevaremin. (@MFVMin) October 11, 2020
Por lo pronto, los encargados de esta tarea son la Agencia de Gestión de Emergencias, el Ejército, la Agencia Danesa para la Agricultura, la Agencia para la Naturaleza y la Administración de Alimentos y Veterinaria —además de la “cooperación” de los dueños o criadores de visones.
Como mencionamos, esta noticia no fue bien recibida por un sector de la sociedad, ya que hubo varias manifestaciones en las zonas de los criaderos, en oposición a la matanza de visones.
Mientras el descontento permanece, el gobierno de Dinamarca prometió recompensar a las granjas que mantengan a los visones con una buena salud, mientras que los criaderos con casos de COVID-19 recibirán una compensación menor para que igual lleven a cabo las medidas sanitarias para evitar los contagios y la propagación del coronavirus.
Por cierto, cuando nos referimos a las pérdidas económicas basta saber que Dinamarca es considerado como uno de los países con mayor exportación de pieles y visones en el mundo, pese a las críticas de grupos ambientalistas y su rechazo a la explotación de esta especie.
Un virus que “mutó”
Como mencionamos, los sacrificios comenzaron en octubre pasado y recién los primeros días de noviembre, esta noticia volvió a ser tendencia porque de dos millones de visones, las autoridades pasaron a 17 millones.
De acuerdo con la primera ministra Mette Frederiksen, se trata de una situación grave, pues los especialistas reportaron que el COVID-19 mutó y este hecho repercutiría en el ser humano. ¿Cómo? Debilitando la capacidad para generar anticuerpos, lo que podría complicar el control de la pandemia cuando las vacunas ya se hayan desarrollado y distribuido.
Es decir, las vacunas serán ineficaces, de acuerdo con el gobierno danés.