Además de ser manchado con los niños, a quienes no tiene el menor empacho en romperles sus inocentes ilusiones, el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez “El Bronco”, se caracteriza por recurrir a un lenguaje “florido” al momento de hablar… pues sobre cualquier cosa. Sin embargo, el incomprendido mandatario ha recibido llamadas de atención por parte de la Comisión de Derechos Humanos del Estado para que evite reflexionar taaaan profundamente sobre ciertos temas.
¿Pues qué de a tiro si es muy tosco en su hablar? Al parecer sí… al menos al momento de referirse a asuntos tan básicos (pero delicados) como el proceso de parto de una mujer, el sobrepeso de algunas de ellas, así como al tema del matrimonio igualitario.
Por ejemplo, hace algunos meses el fino mandatario neoleonés burdamente comentó que a las chicas que están algo pasaditas de peso “nadie las quiere”, por lo que era preferible que los padres les hicieran recomendaciones para cuidar la línea. La cosa no parece tan mala… es más, parece de lo más sano. Quizás sí, pero de seguir los consejos de “El Bronco”, seguro sería necesario hacer un guardadito para futuras terapias psicológicas:
“Es mejor que nosotros, como padres, le digamos a nuestros hijos: ‘Mira lo que te va a pasar. Mira, mijita, ven para acá: A una niña gorda no la quiere nadie’. Sí, es duro, pero la vas a hacer entender. Imagínate al chamaco ese de 15 años, embaraza a su novia de 14. Ya cuando ve que le empieza a crecer el estómago, ese chamaco busca otra”.
En otra ocasión, “El Bronco” hizo lujo de su lengua de oro al momento de expresar su negativo sentir respecto a la cesárea, procedimiento quirúrgico al que algunas mujeres recurren para dar a luz. ¿Por las implicaciones médicas? No, eso es muy superficial… lo que ocurre es que, para Rodríguez Calderón, las mujeres que necesitan cesárea no son tan “mamás” como las que hacen que sus hijos nazcan de forma “natural”: “Creo que debemos tener algunas salas, además podemos ayudarles, para que la madre evite la cesárea. Que la mamá hoy sea mejor mamá, más mamá”.
Ya, por último y respecto al matrimonio igualitario, “El Bronco” se lució al decir que les daba chance a los que quisieran optar por tal acto… nada más que no en su Estado, mejor en Coahuila.
Además de recomendarle evitar el uso de lenguaje “sexista, estereotipado y no incluyente”, la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Nuevo León (CEDHNL) sugirió al botudo mandatario que mejor se vaya a tomar unos cursitos, para ver si así aprende algo de perspectiva de género y de cómo se tienen que respetar los derechos humanos.